Una de las imágenes que más llamó la atención, durante la llegada del presidente de EE.UU. a Londres, fue la de un muñeco inflable, denominado "Bebé Trump", elevado por manifestantes frente al parlamento británico, en modo de protesta por su visita.

El enorme objeto, con la imagen de Trump, tenía un celular en la mano, pañales y una altura de seis metros. Asimismo, el muñeco, fue financiado mediante un crowdfunding que recaudó más de 40.000 dólares para hacerlo posible.

El alcalde de Londres, Sadiq Khan, defendió su decisión de autorizar la manifestación, ya que no es su papel "ejercer censura" o determinar si una protesta es "de buen o mal gusto", expresó.

Por otro lado, Donald Trump, frente a la situación, dijo: "Antes me gustaba Londres como ciudad. No he estado ahí hace mucho tiempo. Pero, si te hacen sentir que no eres bienvenido, ¿por qué me quedaría ahí?".