La espera de no pocos clientes australianos que aguardan por su nueva Isuzu D-Max 2021, parece que se hará más larga. Eso es lo que se infiere tras la ‘suspensión’ por los próximos tres meses del complejo de Isuzu en Tailandia, decisión que obedecería a que uno de los suministradores europeos bajó la cortina por el coronavirus, según informa Car Advice de Australia.
Pese a que es el mismo complejo tailandés que ensambla la D-Max y su hermana Mazda BT-50, por ahora solo la Isuzu se vería afectada, algo que resulta difícil de entender y que solo podría explicarse en la medida que ambas reciban autopartes de distintos productores. Según el medio oceánico, Isuzu ya informó a su red de concesionarios para que hagan saber a los dueños que están a la espera y a los eventuales consumidores que estén por adquirir una.
El documento expedido por Isuzu Ute Australia señala que “debido a circunstancias imprevistas, lamentablemente Isuzu informa que la producción de la (nueva) Isuzu D-Max se ha suspendido temporalmente. La desafortunada pausa en la producción de vehículos está relacionada con uno de nuestros proveedores de componentes clave en Europa (que produce componentes únicos para nuestra D-Max de especificación australiana) ha tenido que cerrar temporalmente su planta de fabricación debido al Covid-19. Como resultado, hemos tenido que suspender nuestra producción de la D-Max en Tailandia por hasta tres meses, con un reinicio tentativo de la producción de vehículos en febrero de 2021”. En principio esto no afectaría al Isuzu MU-X, la versión SUV de la D-Max.
En Mazda de Australia también recogieron el guante ante la preocupación, y expresaron que “en esta etapa todavía estamos evaluando si la restricción de suministro de piezas de Isuzu interrumpirá la producción de la Mazda BT-50. Sin embargo, el lanzamiento de la BT-50 ha sido de alta prioridad para Mazda Australia y hemos pedido un número de unidades en consecuencia. Como tal, seguimos confiando en que tendremos suministro en el futuro previsible y esperamos continuar nuestra campaña para que la camioneta siga estando a disposición de los consumidores australianos”.
Esta impensada realidad ha venido en muy mal momento para Isuzu (y eventualmente también para Mazda), puesto que ambas firmas lanzaron recientemente sus respectivas nuevas generaciones de camionetas después de una década. En ventas han ido muy bien y, de hecho, las dos se colaron en el Top 5 de un mercado altamente competitivo en materia de pick-up (en 2019 la Toyota Hilux fue el vehículo más vendido). En el fan page oficial de Isuzu Australia y en el Instagram @isuzuute_aus ya varios usuarios reclaman haber recibido notificaciones de aplazamientos unilaterales en las entregas... ¡qué pena!