El gobierno lanzó esta tarde el Plan Código Azul, como complemento del Plan Invierno, y cuyo objetivo es proteger a las personas en situación de calle ante las bajas temperaturas.

En la ceremonia realizada en la comuna de Estación Central, el Presidente Sebastián Piñera, acompañado del ministros, la intendenta, alcaldes y sacerdotes -todos simbolizando el plan con una bufanda azul-, manifestó que "este es un esfuerzo muy grande, en el que están comprometidos el gobierno, el Ministerio de Desarrollo Social, los municipios y todas las organizaciones que se preocupan por las personas más vulnerables".

Agregó que "no podemos permanecer indiferentes cuando que hay compatriotas nuestros que, con nuestra misma dignidad y por distintas razones, viven en la calle. No queremos que ninguno más de ellos pierda su vida. Tenemos que hacer un esfuerzo solidario para que eso no ocurra".

Luego Piñera, junto con recordar que en su anterior mandato lanzó el programa "Noche digna", manifestó que "la forma de ayudar es muy simple: cuando vean a una persona en situación de calle llamen al ministerio de Desarrollo social, a sus teléfonos, a su web para poder socorrerla".

El Mandatario dijo también que este problema "es un una herida abierta en el corazón de la sociedad chilena. Con este Plan Código Azul vamos a poder demostrar nuestra solidaridad y nuestro cariño por las personas más vulnerables".

Albergues

Bajo una estimación que en la Región Metroplitana habrá 15 días este invierno en que deberá aplicarse el Código Azul, el gobierno duplicará la capacidad de albergues, agregándose 3.200 cupos adicionales.

Además, vehículos especiales recorrerán las calles para ayudar a las personas en situación de calle y evitándose así que corran el riesgo de morir por las bajas temperaturas. En todos esos lugares tendrán hospedaje, alimentación y atención médica.

El Plan Código Azul no sólo se aplicará en la Región Metropolitana, sino que también en Coquimbo, Valparaíso y Biobío, donde se concentra la mayor cantidad de personas fallecidas en los últimos tres años debido a las inclemencias del tiempo.