En la discusión del proyecto de educación superior en el Congreso, el gobierno accedió a modificar el límite que se había establecido para el cobro de aranceles a los estudiantes que no están en los deciles beneficiados con la gratuidad.

Así, las universidades podrían cobrar a los alumnos del séptimo decil un 40% más del arancel regulado, y para los del octavo y noveno decil se permitirá cobros hasta 60% más de los valores establecidos por el Ministerio de Educación.

El ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, explicó a los senadores que "creemos apropiado, con la ministra, que para las universidades gratuitas, en los deciles siete, ocho y nueve, haya un tope de hasta dónde pueden cobrar".

En tanto, la titular de Educación sostuvo que se reemplaza el 20% de cobro adicional que se había propuesto inicialmente por un tope que llegaría hasta el 60% de los aranceles regulados. "Vamos a presentar indicaciones el día miércoles para que las universidades no le carguen a los estudiantes de los deciles la diferencia entre el arancel regulado y el real", indicó Adriana Delpiano.

El senador Carlos Montes (PS) indicó que "se les pone un techo para que no se escapen, eso no se ha terminado de sancionar y podría ser una concesión a otras cosas que están por verse".

En tanto, el gobierno también se comprometió a establecer en la ley los aportes basales por desempeño para los planteles tradicionales agrupados en el G9 y que hasta ahora se discutían todos los años en la Ley de Presupuestos.

"La Presidenta Michelle Bachelet siempre estuvo por apoyar a las universidades no estatales del Consejo de Rectores y también hay una decisión de presentar una indicación para que los aportes queden establecidos en una ley permanente", afirmó Delpiano.

El senador Andrés Allamand (RN) destacó que "con esto se pone fin a una discriminación que había contra las universidades del G9".