Desde hace mucho tiempo, los científicos estaban intrigados acerca del perfecto aterrizaje de las abejas. Ahora, se ha descubierto cuál es la maniobra que hace que estos insectos puedan descender sin problemas en cualquier superficie.

Hasta ahora se sabía que el uso de la visión era importante en la técnica de estos insectos, pues cuando las abejas se acercan a un objetivo, ajustan la velocidad de acuerdo a cuán grande éste se va poniendo.

Pero para conocer más acerca de este sistema, y gracias al uso de una cámara de alta velocidad que permitía captar todos los planos, científicos del Instituto del Cerebro de la Universidad de Queensland, pudieron darse cuenta que sin importar qué tan plana o irregular sea la superficie, las abejas disminuyen drásticamente su velocidad a 13 milímetros antes de aterrizar, quedando suspendidas en el aire. De ahí, suavemente posan sus patas traseras en la flor o el lugar escogido por el insecto. 

Sin embargo, si la superficie es vertical, las antenas son las que se posan primero. "No esperábamos que las antenas desempeñaran un rol tan fundamental y le añade una nueva dimensión a la técnica de la abeja para lograr el aterrizaje perfecto", dijo el profesor Mandyam Srinivasan.

Los investigadores señalan que esta técnica puede ayudar a los ingenieros a desarrollar una nueva generación de aviones automatizados, según se indica en el sitio Msnbc.com