Si bien la idea del "desafío" ha sido parte del discurso de los organizadores de Lollapalooza desde su debut en Chile, las cifras que se proyectan para la séptima edición capitalina del evento hacen que esta premisa vuelva a cobrar sentido. Según estos números, la versión del festival que se realizará hoy y mañana en el Parque O'Higgins, y que tendrá entre sus protagonistas a Metallica, The Weeknd y The Strokes, será la de mayor envergadura en la historia local de la cita, lo que supone nuevos retos para sus realizadores así como ciertos cambios en la experiencia que vivirán sus asistentes.

Esto, en gran medida, debido a un significativo aumento en la cantidad de gente que llegará a Lollapalooza durante este fin de semana: de acuerdo a las estimaciones de los socios de la productora Lotus, encargados del festival desde su aterrizaje en 2011, la de hoy y mañana será la versión más convocante hasta ahora del festival chileno, que recibirá a 80 mil personas en cada una de sus dos jornadas. Un total de 160 mil asistentes que, de materializarse, superará con creces la marca de 140 mil personas registrada en las ediciones de 2013, 2014 y 2016.

"Este sin duda es un año mucho más desafiante que los anteriores porque tenemos una banda como Metallica, que genera mucha expectativa y que arrastra a un montón de gente nueva que no conoce el festival", asegura Andrés Varnava, Director de Producción de Lollapalooza Chile, para quien la presentación del cuarteto metalero -fijada para el cierre de la jornada de hoy, a las 21.30 horas- es el factor determinante a la hora de analizar el alza en la convocatoria. Un fenómeno que, además, ha llevado a tomar medidas especiales a los organizadores, quienes duplicaron la cantidad de accesos, baños y puestos de comida, al tiempo que incorporaron un nuevo sistema que permite cargar dinero en la pulsera de acceso para comprar comida, bebidas y merchandising.

Las nuevas dimensiones a nivel de producción se reflejan también en lo artístico: la de 2017 será la versión del evento con mayor cantidad de artistas, 67 en total, superando los 65 nombres que integraron el cartel de 2014 y muy lejos de los 56 que se presentaron en la primera edición de 2011, en una nueva muestra del crecimiento año a año de la cita. En cuanto a los artistas nacionales, el cartel también arroja una nueva marca, con 33 grupos y solistas chilenos confirmados en la parrilla, la mayor presencia criolla en el festival a la fecha (el año pasado hubo 25).

A esto se suma la inclusión del Aldea stage, una zona tradicional del evento que este año adquiere por primera vez características propias de un escenario, albergando diversas actividades y shows en vivo durante ambos días. Se trata del séptimo escenario del festival, que se suma a las dos tarimas centrales, Kidzapalooza, el Movistar Arena (Perry's Stage), el Teatro La Cúpula (Lotus Stage) y el escenario ubicado en la salida de este último recinto.

Estos no son los únicos retos de logística que enfrenta la cita este año. La aparición de los Lollapalooza de Brasil y en especial de Argentina -este último en desarrollo desde ayer en Buenos Aires- junto con propiciar mayor sinergia entre los países y agilizar las negociaciones con las bandas, ha obligado a los encargados de Lotus a armar un complejo operativo para la llegada de los artistas desde el país vecino. De hecho, todos los números internacionales del festival comenzarán a llegar hoy mismo a Santiago y la productora local incluso tiene reservados aviones charter ante cualquier eventualidad.

Este panorama de festivales paralelos a ambos lados de la cordillera trae consigo otro inconveniente: los sideshows, que desde el año pasado han ido decayendo en calidad y cantidad en Chile. Sin ir más lejos, el único show paralelo de un artista internacional este año será el del DJ y productor estadounidense Diplo, quien se presentará esta noche en el hotel Radisson de Ciudad Empresarial, minutos después de su actuación en el Parque O'Higgins.

"Este año tenemos un desafío de producción tremendo, que la gente no conoce, y es que todos los artistas que tocan el sábado (hoy) en Chile lo hacen el día antes en Argentina. Y los que tocan el domingo (mañana) tocan el sábado (hoy) en Argentina. Esta logística hace imposible que hagamos sideshows porque simplemente los artistas están tocando en otro lado", explica Varnava.

Perfil de asistentes

Las estadísticas que maneja la producción detrás de Lolla Chile permite también determinar algunas características del público del evento, así como su evolución en estos seis años. Según estas cifras, por ejemplo, se ha ido masificando la compra de tickets "en verde", mientras que un 86% de los asistentes está adquiriendo abonos por los dos días (versus un 14% de tickets diarios). Números que para los productores hablan de la consolidación del evento -más allá del lineup de cada año- y de la búsqueda de la gente por vivir "la experiencia Lollapalooza".

Un cambio significativo es que este año, a diferencia de ediciones anteriores, los hombres serán mayoría: 52% versus 48% de mujeres. Un dato que, en parte, nuevamente podría explicarse por la presencia de Metallica, banda asociada a un público mayoritariamente masculino. Además, un 68% de las 160 mil personas que irán al evento este año son habitantes de Santiago, mientras que un 32% provienen de otras ciudades de Chile y un 9% de otros países, en su mayoría de Venezuela y Perú.