El tercer operador de la industria de casinos en Chile, Marina del Sol -cuya propiedad integran Valmar y el grupo canadiense Clairvest- inició un plan para instalar su primer casino fuera de Chile. Tal es el interés que en las últimas semanas el propio presidente de la firma, Nicolás Imschenetzky, ha viajado a distintos países a de la región a fin de adentrarse en las características locales de la industria y definir su próxima locación. Según el directivo, la industria de casinos en Chile ha tocado techo y la legislación vigente no ayuda a su crecimiento interno.

"Hemos estado buscando alternativas afuera, porque vemos que con este proceso de licitación las puertas en Chile están cerradas. Uno de los países que hemos estado visitando es Uruguay. Y también estamos todos muy expectantes por lo que pasará en Brasil", adelantó.

Respecto a este último país, hace dos años el parlamento discute una ley que permitiría abrir el juego de casinos en ese país, y a juicio de Imschenetzky, este sería un mercado muy interesante de abordar.

"En el último tiempo, Brasil ha promulgado leyes que han ido desmejorando la estabilidad fiscal y necesitan justamente proyectos que les generen más recursos al Estado. Justamente uno de esos proyectos es el de regularizar y abrir las casas de juegos", afirmó. "Si todo sale bien, antes de fin de año debiéramos tener un pie fuera de Chile (...) A nosotros nos gustaría tener un socio local que conozca bien la idiosincrasia del país (...) Estamos buscando la posibilidad de entrar con alguien más, pero lo cierto es que será en Latinoamérica", respondió.

Panorama

Hoy, Marina del Sol genera un Ebitda anual consolidado que bordea los US$ 35 millones, y opera las plazas de Calama, Talcahuano y Osorno. Durante el próximo mes, iniciará las obras del casino de Chillán, plaza que le ha valido una prolongada lucha legal con el grupo Bolt-Peralada, operador del casino de Ovalle.

"Nos tiene muy contentos la reactivación que estamos viendo en Calama con las faenas del cobre. Hay más vuelos. Estamos viendo más gente", destacó Imschenetzky.

Entre los temas que les preocupan, destaca la reciente celebración de Fiestas Patrias, que marcó un precedente importante para la industria de casinos en Chile. Esto, dice, luego de una determinación de la Dirección del Trabajo que señaló que "nadie puede trabajar dos 18 de septiembre seguidos. Más que preocuparme por los costos, a veces terminas contratando a gente que no ha tenido la capacitación el mismo nivel de entrenamiento que el personal con mayor experiencia", concluyó.