Esperar a los huracanes es casi una tradición en el verano de Florida. Pero Irma, que llegó ayer al "estado soleado" y golpeó tanto a los Cayos como a Naples, Fort Myers y Tampa, ha sido diferente. El huracán, que esta mañana se degradó a categoría 1 y luego a tormenta tropical, era más ancha que la península de Florida y había poco rango para escapar de ella. Hasta el momento se han registrado cinco muertos en la zona.

A pesar de que su peligrosidad ha disminuido y que se espera que Irma se debilite aún más durante la tarde de mañana, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) advierte que los vientos pueden mantenerse a más de 110 km/h.

Para intentar escapar de Irma, muchos habitantes de Florida se refugiaron en colegios, casas de familiares y albergues. La tormenta estaba dirigida para el este del estado, lo que llevó a gran parte de la población a huir al norte y oeste. Pero el sábado su ruta se desvió hacia el oeste y los habitantes tuvieron que volver a escapar de esas zonas. "Me siento como si la tormenta me persiguiera" dijo a The New York Times Antonella Giannantonio, que viajó la semana pasada de Miami a Tampa, donde ayer llegó el huracán. En total, 6,3 millones de habitantes recibieron la orden de evacuar en Florida, estado al que el Presidente Donald Trump declaró zona de catástrofe, lo que permite el desbloqueo de fondos federales.

Hoy en la mañana, más de 5,6 millones de personas despertaron sin luz en Florida mientras Irma se dirigía al norte, hacia el suroeste de Georgia y el este de Alabama. El NHC bajó algunas alertas para ciertos sectores del "estado soleado", pero el gobernador, Rick Scott, llamó a los habitantes a tener paciencia para volver a sus casas. Esto, porque el peligro de las marejadas aún sigue alta. La tormenta podría elevar el nivel del mar hasta en casi dos metros.

Antes de tocar Florida, Irma llegó a categoría 5 y pasó por diversas islas del Caribe, donde dejó al menos 29 muertos.  Allí el balance es negro. En Cuba, donde pasó el sábado con ráfagas de 260 km/h, al menos 10 personas murieron como consecuencia de Irma a pesar de que un millón de personas habían sido evacuadas por precaución, entre ellas 15.000 turistas. Siete de ellas fallecieron en La Habana, ciudad que sufrió fuertes inundaciones y marejadas. Los cayos, las islas turísticas de Cuba, quedaron con graves daños.

En Haití y República Dominicana el paso de Irma dejó varias inundaciones y heridos. En Haití el impacto fue menor de lo esperado ya que el huracán pasó más al norte, mientras que en República Dominicana los vientos obligaron a evacuar a casi 20.000 personas y más de 2.000 viviendas quedaron dañadas.

Luego de llegar a Puerto Rico, donde al menos dos personas murieron, las calles quedaron completamente inundadas y más de la mitad de los tres millones de habitantes se quedaron sin luz, Irma pasó por las Islas Vírgenes británicas y provocó la destrucción de al menos el 70% de su infraestructura. El gobernador de la zona declaró en estado de emergencia el territorio.

En San Bartolomé, San Martin y Anguila la tormenta llegó el miércoles. La isla de San Martin fue arrasada por los vientos de más de 200 km/h y quedó con el 70% de sus edificaciones parcial o totalmente destruidas. Al igual que San Bartolomé, que dejó entre el 80 y 90% de sus construcciones dañadas. En ambas partes los daños se calculan en US$ 1.450 millones. En Barbuda casi toda la isla presenta daños en infraestructura debido a los vientos.

Saqueos

Desde el paso de Irma, se han registrado una serie de robos y saqueos en Florida. Delincuentes ingresaban a las casas aprovechando los toques de queda y la gente que huyó de sus hogares y negocios. Hoy en la mañana, se habían registrado 32 arrestos por saqueos.

Además, varias islas del caribe se han quedado desabastecidas. El miércoles, antes de que Irma tocara las islas, los habitantes de San Martin, territorio que comparten Holanda y Francia, habían comenzado a recolectar lo que necesitaban para sobrevivir el huracán. Pero la noche del jueves, varios grupos de personas, incluso armadas, se abalanzaron y saquearon electrodomésticos, artículos electrónicos y vehículos, señala The New York Times. "La gente lucha en las calles por lo que queda", dijo Jacques Charbonnier, de 63 años, al Times.

En varias islas del Caribe los habitantes luchaban contra la escasez de alimentos y agua, además de la electricidad y el servicio telefónico, inexistente desde Irma. Reino Unido, Francia y Holanda han dicho que van a intensificar su respuesta y que supervisarán más aún los territorios, luego de que fueran criticados por su lenta respuesta. París y Ámsterdam dijeron que estaban enviando tropas adicionales para restablecer el orden, además de la ayuda aérea que está llegando a la zona. El Presidente francés, Emmanuel Macron, visitará mañana el lugar y dijo que aumentaría en el doble las 1.100 tropas que tienen allí.

Además, más de 265 militares holandeses han sido desplegados en la isla, y se espera que otros 250 sean enviados a la región para ayudar a mantener el orden.

La crisis empeoró aún más el sábado, ante la alerta de llegada del huracán José. Aunque las islas golpeadas por Irma evitaron un golpe directo de José, su llegada obligó que se suspendieran las operaciones de rescate y ayuda. Hasta ahora, alrededor de una docena de muertos a ambos lados de la isla han sido atribuidos a la tormenta, y se espera que el número aumente.