El acuerdo entre LATAM Airlines y el holding IAG, que incluye a las aerolíneas British Airways e Iberia, recibió este miércoles la aprobación del regulador de la competencia de Brasil (Cade). Eso sí, con algunas restricciones.

Las condiciones planteadas, afectan principalmente a la ruta Londres-Sao Paulo, donde Cade exige a las compañías que eviten recortes de capacidad durante siete años y pongan derechos de aterrizaje a disposición de rivales en los próximos 10 años.

El organismo pidió además a las aerolíneas que abran dos nuevas rutas entre Brasil y Europa, y que al menos una de ellas considere una ciudad distinta a Sao Paulo o Río de Janeiro.

Pese a las condiciones, LATAM valoró la decisión del regulador brasileño. "Esta decisión se suma a las múltiples aprobaciones que este tipo de acuerdos han tenido en el mundo entero y ratifica la convicción de las autoridades de libre competencia en los beneficios que éstos conllevan", dijo Enrique Cueto, vicepresidente ejecutivo de LATAM, en un comunicado.

Desde la compañía aseguraron que confiaba en que las otras autoridades antimonopolio de la región analicen y ponderen los beneficios de los pactos conocidos como JBA (Joint Business Agreement), una tendencia en la industria aeronáutica mundial.

"Este tipo de acuerdos forman parte del desarrollo del transporte aéreo para proveer menores precios y mejores servicios, promoviendo el turismo en la región", señalaron.