La compañía de retail Ripley, controlada por la familia Calderón, anunció este jueves que decidió terminar sus operaciones en el mercado colombiano debido a que no obtuvo los resultados esperados.

"En sesión celebrada el día de ayer y luego de un largo proceso de análisis el directorio de la compañía ha tomado la decisión de finalizar la operación en Colombia", dijo Sergio Hidalgo, gerente general subrogante de Ripley Corp mediante un hecho esencial enviado a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS).

La empresa precisó que a través de sus filiales en Colombia realizó significativos esfuerzos para cumplir con su plan de inversión en dicho país. "Se pusieron en marcha múltiples iniciativas para hacer competitivas las tiendas y alcanzar las metas propuestas, pero no se dieron las oportunidades para materializar el plan de negocios previsto", agregó.

Adicionalmente, indicó, el escenario macroeconómico de Colombia sufrió cambios que no eran previsibles en la época en que se decidió invertir en ese país. "De este modo no se produjeron los resultados esperados ni lo niveles de participación de mercado necesarios para garantizar la sostenibilidad de las operación del mismo", explicó

La compañía detalló que el proceso de cierre de las tiendas se realizará en forma escalonada durante los próximos 90 días y aseguró que las filiales en Colombia honrarán todos sus contratos y compromisos legales, tanto con los proveedores como con las personas que son parte de la operación.

"Esta decisión es consistente con la visión estratégica de la compañía que enfocará sus recursos al fortalecimiento y consolidación de su presencia en los mercados de Chile y Perú en los que actualmente tiene operaciones sólidas y con oportunidades de crecimiento. Así el foco de la compañía está hoy en hacer más eficiente su operación y mejorar la rentabilidad", explicó.

Asimismo la empresa informó que en el marco del proceso de finalización de las operaciones en Colombia, su filial Ripley Compañía de Financiamiento firmó un contrato de venta con el  Banco Popular por la totalidad de la cartera financiera.

El contrato se encuentra sujeto a la aprobación y autorización por parte de la Superintendencia Financiera de Colombia y al cumplimiento del procedimiento establecido en el Estatuto Orgánico del Sistema Financiero de la República de Colombia, dijo Ripley.

IMPACTO EN RESULTADOS

Ripley opera seis multitiendas en Colombia: Bucamaranga, Calima, Centro Mayor, Neiva, Villavicencio y Oviedo de las cuales Centro Mayor y Neiva son propiedad de la firma, mientras que el resto funciona en locales arrendados. La compañía inauguró su primer local en Colombia en abril de 2013.

Las ventas de Ripley en Colombia representan aproximadamente un 3% del total de los ingresos de la compañía y generaban una pérdida recurrente que en el ejercicio 2014 llegó a US$27 millones. Ripley precisó que los costos asociados al cierre de la operación en Colombia se reflejarán en los estados financieros consolidados al 31 de diciembre de 2015, mediante un cargo por un monto aproximado de US$92 millones y la reclasificación a resultados de otras reservas registradas en el patrimonio de la diferencia de cambio generada en las inversiones en ese país por US$21 millones.

"En términos de flujo de caja se estima que esta decisión representará un ingreso aproximado de US$18 millones y la eliminación a futuro de la pérdida recurrente en Colombia antes mencionada", dijo la compañía.

Las acciones de Ripley reaccionaron al alza tras el anuncio, y se cotizaban con un aumento de 3,09% a $287,50, a media sesión, en la Bolsa de Comercio de Santiago. Los títulos cerraron con un avance de 2,57% a $286,07.