Hasta la Fiscalía de Las Condes llegarán hoy, a las 9.30 horas, los diputados de Renovación Nacional Diego Paulsen y Marcela Sabat. Allí, acompañados del abogado Eduardo Riquelme, estamparán una nueva denuncia contra el hijo de la Presidenta Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos.

Lo anterior, con el objetivo de que el Ministerio Público investigue el posible delito de cohecho por parte de Dávalos mientras ejerció como asesor en la Dirección de General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon).

La decisión fue adoptada ayer por la bancada de RN, luego de que el fiscal a cargo de la investigación del caso Caval, Luis Toledo, rechazara la solicitud efectuada por el abogado Riquelme -quien es parte querellante en esa causa- de indagar eventuales delitos en la relación laboral paralela que tuvo Dávalos con la Direcon y Caval durante el primer semestre de 2012, argumentando que ese hecho no está vinculado con la investigación por la venta de los tres terrenos en Machalí. Debido a esto, los parlamentarios decidieron interponer una nueva denuncia, completamente desligada del caso Caval.

Según declaró el propio Dávalos ante el fiscal Toledo el pasado 13 de abril, el primer semestre de 2012 trabajó para la Direcon y también para Caval, periodo en el cual habría realizado labores para el empresario Gonzalo Vial Concha, socio de Agrosuper y con diversos negocios en la Sexta Región. Según declaró Dávalos ante el persecutor, a ese empresario "lo vi una vez en el Hotel Hyatt en Santiago, por una reunión de una empresa india o de Singapur que quería realizar proyectos mineros en Chile y Vial tenía pertenencias mineras. A mí me invitaron como traductor".

Es justamente la relación de Dávalos con Vial Concha el punto que buscarán despejar los diputados, además de que se determine si los proyectos de los empresarios extranjeros que asistieron a esa reunión tenían alguna vinculación con las funciones públicas que desarrollaba Dávalos en el departamento de Asia-Pacífico en la Direcon.

"Cuando el fiscal le preguntó si recibió pagos por ese trabajo, él respondió que sí. Vamos a pedir investigar si esos pagos constituyen cohecho", afirmó ayer el diputado Diego Paulsen, quien es miembro de la comisión investigadora de la Cámara por el caso Caval.

A juicio del parlamentario, la relación del empresario con Dávalos "es una de las explicaciones, que hasta ahora todos desconocíamos, de cómo Caval pudo tener utilidad por $ 1.500 millones en su primer año".

Por su parte, la diputada Marcela Sabat -también integrante de la comisión- agregó que "estas nuevas aristas del caso van reafirmando lo que hemos creído desde un inicio, que es que la Presidenta Bachelet tenía conocimiento de los negocios de su hijo. No puede ser que él haya tenido tantos vínculos con diversos empresarios mientras era servidor público, y que ella no haya sabido".

En tanto, el abogado querellante, Eduardo Riquelme, afirmó que "estos hechos deben ser investigados; hemos visto que para eso es necesario interponer una nueva denuncia, y eso es lo que vamos a hacer".