El Colegio Santo Tomás de Puerto Montt no podrá convertirse en particular pagado. Así lo determinó la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Educación de Los Lagos, que a través de una resolución exenta rechazó la solicitud de cambio de financiamiento realizada por la Sociedad Educacional Santo Tomás.

Según el documento, la Ley de Inclusión obliga a los recintos que quieran ser pagados a informarlo por escrito un año antes de que inicie el ciclo escolar en que dejan de recibir financiamiento del Estado. Esto, según la Seremi, habría sido incumplido por parte de la administración del Colegio Santo Tomás. "No se acreditó que la comunicación fuera realizada en tiempo y forma a los padres, madres o apoderados y a la comunidad educativa", consigna la resolución.

A mediados de diciembre del año pasado, los apoderados del Colegio Santo Tomás comenzaron a recibir, vía correo electrónico, un comunicado en que los sostenedores del recinto informaban su paso a particular pagado, argumentando que el cambio se debía a las consecuencias de la Ley de Inclusión.

En febrero de este año, el director del establecimiento, Faustino Villagra Santana, se dirigió a toda la comunidad a través de un comunicado difundido en la página web del colegio: "La entrada en vigencia de la Ley 20.845 nos ha obligado a reflexionar sobre la viabilidad de nuestro proyecto educativo en este nuevo escenario, concluyendo en la necesidad de efectuar cambios que aseguren su autonomía y permanencia en el tiempo".

En esa minuta, la autoridad de dicho establecimiento señaló que "considerando que el colegio cuenta con la cantidad de alumnos suficientes como para prescindir de los aportes del Estado, la mejor solución para la continuidad del proyecto educativo es convertirse en particular pagado a contar del año 2017", e informó que la colegiatura no superará las 7,20 UF mensuales -cerca de $ 180.000-, en diez cuotas, para el próximo año.

En marzo de este año, un grupo de apoderados inició una serie de protestas a raíz de esta situación, reclamando que no habían sido tomados en cuenta ni habían recibido la noticia de manera oficial. La conmoción escaló y obligó al director nacional de la Red de Colegios Santo Tomás a emitir una declaración para la comunidad en la cual, ante el aumento de la colegiatura, señalaba que se les mantendría la beca a quienes estuvieran 100% cubiertos por ese beneficio otorgado actualmente por el Estado y además se le entregaría "ayuda financiera para las familias que más lo necesiten por un monto similar al destinado para este efecto en el 2016".

El 10 de agosto la seremi de Educación había emitido un informe negativo y el colegio presentó sus observaciones y los documentos que buscaban respaldar que sí se informó adecuadamente a la comunidad. Sin embargo, esto no fue suficiente para cambiar la decisión del organismo. "Si bien se acompaña un listado con firmas de apoderados, ésta se refiere a la asistencia de éstos a una reunión, y no se acredita que se refiera a un conocimiento expreso del cambio de financiamiento de este establecimiento", concluye la secretaria regional del Mineduc.

"Se tiene presente, además, que un número importante de apoderados acompañó formalmente a esta secretaría ministerial una declaración de no haber tomado conocimiento de este cambio", agrega la resolución.

De este modo, el organismo decretó que el Colegio Santo Tomás deberá funcionar como subvencionado el próximo año, pero deja espacio para que los dueños del recinto puedan apelar.

Contactados por esta resolución, la sociedad sostenedora no emitió opinión.