Luego que este jueves la minera canadiense Barrick anunciara su decisión de suspender la construcción del proyecto Pascua Lama, manteniendo sólo las obras que se requieren para la protección del medio ambiente y el cumplimiento regulatorio, el sindicato de trabajadores manifestó su confianza en que se mantendrán las obras del plan de manejo de aguas.

Las obras de construcción ya se encontraban suspendidas temporalmente en el lado chileno por orden de la justicia y la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) y con esta decisión también quedan paralizadas en la parte argentina.

"La información divulgada este día era esperable, ya que Barrick ha sido incapaz de levantar inversionistas o socios estratégicos que inyecten capital fresco, en condiciones aceptables para Barrick, ya que ante la incertidumbre sobre el proyecto, por los problemas ambientales en Chile, los costos de financiamiento se han elevado, o bien, los eventuales socios han planteado, a cambio de un limitado aporte, la entrega de un alto porcentaje de la propiedad del proyecto", señaló el sindicato.
 
Agregó que "la conclusión sobre este escenario es muy clara. Hoy la prioridad es viabilizar la situación en Chile, lo que solo se hará cumpliendo con las medidas y  construyendo las obras comprometidas para alzar la paralización dispuesta por la Superintendencia de Medio Ambiente y los Tribunales. Es por ello que lo único que no se suspende, como expresamente lo indica el comunicado de la empresa, son estas actividades".

A comienzos de abril la Corte de Apelaciones de Copiapó ordenó paralizar completamente las obras del proyecto tras acoger la orden de no innovar interpuesta por comunidades diaguitas del valle del Huasco.

La resolución de la Corte de Copiapó estuvo en línea con la sanción aplicada por la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), que el 24 de mayo aplicó una multa de unos $8 mil millones a Barrick y paralizó las obras de la iniciativa hasta que la empresa no ejecutara el sistema de manejo de aguas en la forma prevista en su RCA.

El sindicato aseveró que "el anuncio efectuado hoy confirma la importancia de mantener la continuidad de las labores en Chile, que si bien pueden sufrir retrasos puntuales –permisos u otros- son críticas para superar la situación global de Barrick, la que no está dispuesta a perder este multimillonario activo".
 
"Esperamos, en consecuencia, que la paralización del lado argentino no tenga mayores repercusiones en Chile, particularmente sobre la estabilidad laboral, salvo algunas situaciones coyunturales propias de la construcción de las obras comprometidas para salvar la situación medio ambiental, y en todo caso, tampoco debiera afectar el curso del actual proceso de negociación colectiva, ya que lo que más preocupa a la empresa hoy, es cualquier contingencia que pueda comprometer la resolución de los problemas en el lado chileno".

Los trabajadores de lado chileno del proyecto Pascua Lama aprobaron ayer, en el marco de un proceso de negociación colectiva, una huelga que podría hacerse efectiva a partir del 8 de noviembre, en caso de iniciarse el proceso legal de "buenos oficios".