Por primera vez en Chile se presenta Ariadna en Naxos, de Richard Strauss, y se convierte en uno de los puntos cúlmine de esta temporada en el Teatro Municipal.

Esta ópera es protagonizada por la soprano alemana Christine Goerke (Prima Donna / Ariadne), el tenor estadounidense Richard Cox (El Tenor / Baco), la soprano rusa Ekaterina Lekhina (Zerbineta) - que se lució con una brillante interpretación de Gilda en Rigoletto el año pasado -  y la mezzosoprano alemana Gundula Schneider (El Compositor). La dirección de escena es del argentino Marcelo Lombardero, que ya dio que hablar con la vanguardista puesta en escena de la ópera Alcina, en la temporada de ópera 2010. La escenografía es de Diego Siliano, el vestuario, de Luciana Gutman, y la iluminación, de José Luis Fiorruccio. La dirección musical es de Rani Calderón.

TEATRO DENTRO DEL TEATRO
La acción de esta ópera transcurre en la mansión de un magnate (prólogo) y en un escenario que representa la isla de Naxos (único acto). El dueño de casa propone hacer la ópera "Ariadna en Naxos", después de la cual se presentará una ópera buffa, "La infiel Zerbinetta" y sus cuatro amantes. Cuando el joven compositor se entera, se enfurece porque considera indigno juntar ambos espectáculos en la misma velada. Ante la disyuntiva, el dueño de casa corta por lo sano: mezclará los dos espectáculos.

El único acto empieza en una isla desierta, con una gruta al fondo, Naxos, en la que fue abandonada Ariadna por Teseo. A pesar de los intentos de Zerbinetta y sus compañeros por animarla, ella sólo espera la muerte. Zerbinetta le cuenta que los hombres son infieles por naturaleza, que no merece la pena llorar por ellos y la manera más sencilla de superar un corazón roto es encontrar un nuevo amor. Pero esto no anima a Ariadna. Aparecen entonces los compañeros de Zerbinetta, que empiezan a perseguirla. Ella coquetea con unos y otros, y desparece con su elegido, Arlequín.

Las ninfas Náyade y Dríada anuncian la llegada del dios Baco, quien acaba de abandonar a la hechicera Circe. Baco, fascinado por la belleza de Ariadna, cree que es una maga como Circe. Ariadna se de cuenta de que una nueva vida se abre ante ella, y Baco se enamora de nuevo. Zerbinetta dice que siempre caemos cautivos de un nuevo dios y Baco afirma su amor: "Antes morirán las estrellas que tú entre mis brazos".