Alerta de spoilers: si es que no ha visto el primer capítulo de la nueva temporada de The walking Dead, se recomienda no seguir leyendo.

La tensión es lo que marcó la primera hora del esperado nuevo ciclo de la serie más vista de la televisión actual. Luego de que durante la temporada anterior, el villano Negan (Jeffrey Dean Morgan) pareciera siempre ir un paso delante de Rick (Andrew Lincoln) y su grupo de sobrevivientes, con cada intento de estos últimos por engañar al antagonista resolviéndose de forma horrible y tortuosa, en el inicio de su octava temporada, la amenaza de que el plan de los protagonistas saliera nuevamente mal es permanente.

Pero el desenlace, por una vez, es distinto. Rick y los suyos logran casi sin complicaciones llevar a cabo su objetivo: destruir los muros del Santuario, la base de Negan y su bando, los Salvadores, de paso provocando que una horda de zombies se tomara el lugar. Su principal enemigo logró salir del ataque con vida, pero sus fuerzas quedaron seriamente mermadas tras perder la primera batalla de una guerra que promete extenderse toda la temporada. Por algo el ciclo adaptará All out war, uno de los arcos históricos más populares de The walking dead, la historieta, creada por Robert Kirkman, que aborda el extenso y violento enfrentamiento entre las fuerzas de Rick y Negan.

La serie regresó a la pantalla chica esta noche a través de Fox Premium, en estreno simultáneo con Estados Unidos, para este lunes debutar por la señal básica de Fox a las 22 horas (los siguientes capítulos seguirán la misma dinámica: el domingo por Premium, el lunes por cable básico), con un capítulo que no sólo marca el inicio de una nueva temporada, sino que también es el episodio 100 de la popular serie post-apocalíptica.

En un capítulo más cargado a la acción que lo que The walking dead estaba acostumbrada en sus últimos ciclos, los habitantes de la comunidad de Alexandria, entre ellos Rick, Daryl (Norman Reedus), Morgan (Lennie James) y Carol (Melissa McBride) pasan gran parte del episodio haciendo los preparativos para atacar al bando de Negan, asesinando uno por uno a sus vigías, hasta finalmente conseguir una necesitada victoria, y trayendo algo de esperanza al grupo protagónico, que durante la temporada siete supo prácticamente sólo de torturas.

Pero entre medio de la alegría y discursos, la serie, manteniendo su estilo lúgubre, anticipa una tragedia en el futuro cercano. A través de una narrativa no lineal, el capítulo exploró tres temporalidades distintas: el presente, con el ataque del bando de Rick contra Negan, un futuro en donde el protagonista se ve destrozado mirando una tumba y una tercera situación más misteriosa, y que ya había llamado la atención de los fanáticos en los primeros avances de la temporada. Corresponde a las imágenes del bautizado en internet como "viejo Rick", por la apariencia canosa y barbuda del personaje interpretado por Lincoln. En la escena, el protagonista usa bastón y recorre su hogar, donde vive con Michonne (Danai Gurira), mientras pareciera que Alexandria prepara una fiesta. Entonces aparece su hija Judith, algo mayor que su presente preescolar, dejando en evidencia que los hechos ocurren años en el futuro.

El episodio no da una respuesta definitiva sobre si el escenario es efectivamente un vistazo al futuro o una alucinación por parte de un Rick consumido por la culpa mientras llora frente a la tumba de un misterioso personaje y de seguro será uno de los misterios principales de la temporada.

El capítulo estuvo además dedicado a John Bernecker, el doble de riesgo que falleció durante la filmación de los nuevos episodios tras una caída desde altura que salió mal. También se le dedica a George A. Romero, director pionero del cine de zombies y quien murió en julio. Curiosamente, el realizador manifestó en más de una oportunidad su desprecio por la serie, asegurando que no tenía sustancia.

Como siempre, la octava temporada de The walking dead tendrá 16 capítulos, con una primera parte de ocho que se extenderá hasta diciembre, para reanudar la tanda final en febrero.