Vivir en Santiago significa enfrentar diariamente un reto particular. Se trata de una ciudad instalada en una cuenca, donde por lo mismo, los desafíos sobre ventilación del aire y planificación urbana, continúan marcando la contingencia para la ciudad más habitada del país. En medio de este escenario, la presencia de áreas verdes se hace fundamental y según los registros del Parque Metropolitano de Santiago (Parquemet), en 2016 la Red de Parques Urbanos de la región, recibió más de tres millones de visitantes.
En efecto, la presencia de la naturaleza puede marcar la diferencia en el bienestar físico y mental en poblaciones urbanas. De esta manera lo explicó Camilo Bass, médico familiar especialista en salud mental y secretario general del Consejo Regional Santiago, del Colegio Médico (Colmed): "se debe comprender como salud mental al estado de bienestar que permite a los individuos realizar sus habilidades y afrontar el estrés que genera la cotidianidad, como trabajar de manera productiva y fructífera, contribuyendo a una comunidad", recalcó.
Bass asegura que los bajos niveles de contacto con la naturaleza que experimentan los habitantes urbanos, pueden incidir en una mayor presencia de patologías en el bienestar físico y mental de la población.
"La presencia de naturaleza puede marcar una gran diferencia y disminuir la prevalencia de desórdenes mentales. Varias investigaciones han demostrado que el contacto con la naturaleza impacta positivamente en la presión sanguínea, los niveles de colesterol de la sangre, actitudes en el diario vivir y la reducción del estrés", recalcó el experto.
Aumento del financiamiento para la Red de Parques
Parquemet recibe todos los parques construidos por el Serviu Metropolitano para ser administrados, mantenidos, conservados y asegurados, a través de su programa de parques urbanos, que administra una red de 19 parques (sin considerar a Parquemet), es decir, se trata de 234.27 hás de áreas verdes distribuidas en 15 comunas: Cerrillos, Cerri Navia, Estación Central, Huechuraba, La Pintana, La Florida, Lo Espejo, Pedro Aguirre Cerda, Peñalolén, Quinta Normal, Recoleta, Renca, San Bernardo, San Joaquín y San Ramón.
"A través de nuestra red, fomentamos la vida al aire libre, ayudamos a mejorar la calidad de vida de las personas y buscamos "sembrar felicidad", considerando que estos espacios se hacen indispensables para el desarrollo de actividades recreativas, culturales, educativas y deportivas, que fomentan la convivencia e integración social, en un ambiente seguro y en contacto con la naturaleza", destacó Mauricio Fabry, director del Parque Metropolitano de Santiago.
Es así como el gasto para financiar la mantención de la red de parques durante el año alcanzó los M$ 7.875 millones, aumentando en un 8% el gasto respecto del año anterior. Además, el programa atendió y controló los pagos del contrato de conservación, mantención y seguridad del Cerro San Cristóbal, por un monto de M$ 3.215 millones
También en 2016 se construyó un nuevo pozo profundo de 180 metros en el Parque André Jarlán, invirtiéndose M$ 159 millones. Esta inversión permitió recuperar el caudal de 50 l/s de agua para riego que tenía el recinto hasta el año 2010, y que se perdió probablemente porque el terremoto de ese año produjo desplazamiento de capas freáticas y por la prolongada sequía que ha afectado a la región los últimos ocho años.
Nuevo Parque Huechuraba
A fines de febrero de 2016. Se abrió al público el Parque Huechuraba, emplazado a un costado de la población La Pincoya 2, cuyos vecinos cuentan ahora con 4,7 hectáreas de un sitio de alto estándar, que cuenta con mobiliario urbano, juegos infantiles, máquinas de ejercicio, paseos peatonales, ciclo paseo, zonas de picnic con asaderas, luminarias eléctricas y cierre perimetral. Se estima que durante el año fue visitado por más de 50 mil personas.
Manejo de residuos
Mantener los parques limpios, es un tremendo desafío y el manejo de los residuos es un fundamental para su mantenimiento. Por ello, cada parque cuenta con zonas de acopio para acumular desechos inorgánicos sólidos (basura), desechos inorgánicos reciclables como vidrios, papel, latas de aluminio y botellas plásticas, y desechos orgánicos provenientes de la limpieza y labores de mantención, que son tratados para confeccionar compost in situ, que luego es utilizado en los mismos parques.
En 2016 se inició además el plan "Recicla", asociado a la educación en cinco parques urbanos, los de Cerrillos, Cerros de Chena, La Platina, Quebrada de Macul y el Parque Fluvial Renato Poblete.