En medio del periodo de "reflexión" de algunas figuras como Gutenberg Martínez sobre su militancia en la DC, la senadora y ex ministra Ximena Rincón confiesa que evaluó dejar el partido luego de la renuncia y posterior expulsión de su hermano, el ex diputado Ricardo Rincón, quien enfrentaba una denuncia de violencia familiar. Finalmente, decidió quedarse porque "es en los momentos difíciles donde se prueba el coraje". Con todo, adelanta que apoyará un proyecto senatorial de su hermano aunque la expulsen de la DC, y define explícitamente su apoyo a Francisco Huenchumilla como carta para presidir la colectividad, justo en momentos en que el senador habría dado un giro y evalúa competir para presidir la mesa.

¿Cuál es su evaluación del gobierno a un mes y medio de su instalación?

Claramente es un gobierno de un Presidente que tiene la experiencia de haber estado en La Moneda y que, por lo tanto, creo, se cuida más en algunos aspectos. Pero llama la atención que cometa errores que no debieran cometerse (...). Pero es un gobierno que viene con las ideas claras de lo que quiere hacer.

¿Qué cree usted que quiere hacer el gobierno?

Quiere retrotraer ciertas cosas a un estado que le acomoda más desde su perspectiva del país y con promesas hacia la ciudadanía que no sé cómo va a ser capaz de cumplir si retrotrae, por ejemplo, materias como la reforma tributaria en cuanto a recaudación, no en cuanto a simplificación (...) Creo que se jugó mucho con ciertos temas ante la opinión pública que ellos iban a garantizar y que no se están viendo de manera rápida. Por ejemplo, el dinamismo en materia de crecimiento. Uno ve a ciertos sectores de la economía súper preocupados porque no hay un despegue en materia de crecimiento como el que se había prometido.

El gobierno retiró un proyecto que contemplaba reparaciones a víctimas del régimen militar, Hernán Larraín dijo que los jueces eran de izquierda. ¿Ha habido autogoles del gobierno en momentos que buscan acuerdos nacionales?

Siento que en estos temas los traiciona el pensamiento, y no se condice con el discurso. Y eso no es bueno ni para el país ni para la política y lo lamento. Si queremos tener gestos de unidad no podemos hacer cosas que van en un sentido completamente distinto. Sin lugar a dudas el tema de la reparación a las víctimas es una jugada en falso, agravada además por un diputado (Ignacio Urrutia) que además es de mi región. No solo lo lamento, lo condeno, porque con la vida de las personas y los DD.HH. no se juega.

Usted, Quintana y Allende no son los representantes de la oposición en la Comisión Infancia. Sin embargo el gobierno no los convocó a la mesa de trabajo.

Y con un agravante adicional. Se invita a un representante de los senadores PS y del PPD y en el caso de la DC a ninguno. Se lo hice ver privadamente al ministro del ramo y al ministro del Interior, y bueno, son decisiones de gobierno. Nosotros vamos a seguir trabajando en el tema y llevando propuestas y presionando por transformaciones y acciones porque es un tema en el que creemos. Estamos trabajando un propuesta y bienvenido que nos escuche el gobierno, que pueda tomar lo que estamos planteando, pero nosotros tenemos un rol como representantes de la ciudadanía y tenemos que ejercerlo.

¿Qué le pareció la nominación del hermano de Piñera en la embajada de Argentina?

Alguien salía diciendo por ahí que la presidenta nombró a su hijo en las fundaciones. Cuidado, siempre ese cargo lo ha ejercido la señora de o marido de, aunque no hemos tenido aún un marido de, y es un cargo ad honorem, no es comparable. Estamos ante la República, no es bueno. Y no es solamente que sea hermano, que ya me parece complejo y una muy mala señal a la ciudadanía, sino que hay otro tema que no ha estado en el debate a raíz de este nombramiento: siempre las mismas personas en los cargos en el gobierno. ¿Cómo no va a haber gente nueva que pueda aportar? No digo (gente) joven nueva, digo que no haya estado en el cargo.

Desde la oposición se cuestiona que algunos ministros se repitieron el plato y personeros como Chadwick y Coloma tienen a familiares en el gobierno.

Respecto de que los ministros se repitan el plato no me preocupa mucho porque hicieron gobierno con el Presidente, él se sintió satisfecho y cómodo con su rol, y la verdad es que lo respeto. Me refiero a otros cargos. Y ahí dos cosas: una, el tema del nepotismo, hermano del Presidente embajador, y otra el tema de cómo los familiares directos de los ministros están de gobernadores, asesores, la red es impresionante. Doble falta porque fue algo que persiguieron en el gobierno de la presidenta, entonces doble discurso, doble estándar. Cuidado.

Hubo distintas versiones sobre la asistencia de Carolina Goic a la Comisión de Seguridad del gobierno. ¿Había efectivamente un acuerdo de bancada de no participar?

Había un acuerdo, pero no voy a entrar en detalle porque entiendo que ya es noticia vieja y bueno, ocurrió lo que ocurrió.

Jorge Pizarro habló de que Goic actuó con personalismo ¿Usted cree que fue así?

No voy a calificar a la senadora Goic. Esto ya se trató y entiendo y espero que esté superado respecto de cómo vamos a trabajar hacia adelante.

La DC bajó a su mínimo histórico de diputados desde los años 90 y disminuyeron en senadores. ¿La DC está pagando costos por la decisión de ir directo a primera vuelta?

Fui de la tesis en la DC de que teníamos que ir a una primaria, de que si la potencia de la candidata (Carolina Goic) era la que se señalaba que existía íbamos a ser capaces de ganar esa primaria y perdí. Creo que entre quienes habíamos tenido algún rol como senadores, ministros, intendentes, la única que estuvo con voz en esa junta nacional fue quien habla, y señalé que esto significaba un resultado electoral completamente adverso, que era imposible que a tan poco tiempo fuéramos capaces de posicionarnos para tener un buen resultado. Se exhibieron números, cifras, desvirtuando mi afirmación, y se aseguró que íbamos a pasar los dos dígitos en materia de respaldo, lo que la verdad es que fue un chascarro completo, (sacamos) cinco puntos y algo. Además se señaló que era culpa de los que éramos candidatos, lo que me parece insólito, porque cuando tú miras otras candidaturas como la del propio (José Antonio) Kast, que le ganó a nuestra candidatura, la verdad es que él no llevaba candidatos y no tenía ni siquiera partido. Por lo tanto, aquí hubo una desvinculación completa de la figura que llevábamos como candidata a la Presidencia y lo que la ciudadanía quería. La ciudadanía nos culpaba a nosotros de haber roto la unidad política que existía, y pueden darse todas las explicaciones que se quieran (...) pero creo que teníamos un rol que jugar por responsabilidades históricas y no lo jugamos. Luego de perder la presidencial pedí que no hubiera Junta Nacional, que recorriéramos el país, que definiéramos con los militantes los ejes por los cuales nos íbamos a jugar (...) Dije que era un error fijar elecciones y que la directiva renunciara, también perdí. Y bueno, estamos donde estamos, con un partido muy fraccionado, polarizado, con mucha desilusión de nuestros militantes. No creo que tengamos que seguir hablando que la DC tiene su domicilio en la centroizquierda. Creo que es un error profundo.

¿Por qué?

Porque creo que la DC tiene que volver a lo que son sus orígenes, un partido nacional, popular, de vanguardia, moderno. Y tiene que replantearse ante la ciudadanía. ¿Cómo lo hace? Tomando los temas que son de la ciudadanía hoy día y que requieren voz y liderazgo. Ser capaces de instalar mínimos éticos en Chile.

Algunos diputados aseguran que en la Cámara hay dos oposiciones, algo distinto al trabajo que en el Senado ustedes desarrollan con la ex Nueva Mayoría. ¿Puede la DC quedarse aislada?

Es que es un error plantear a la DC en la disyuntiva de estar en unidad con una coalición cuando no es minuto de coaliciones. Hoy día lo que la DC tiene que hacer es definir qué quiere ser, qué le quiere plantear al país y creo que es un error, de diputados o no diputados, senadores o no senadores, plantearse en torno a si vamos a ser oposición o no oposición con el gobierno. Tenemos que definir qué le queremos ofrecer al país. Y quienes están adelantando la definición de los candidatos, yo veía algunos socialistas muy desesperados, se equivocan. La gente no va a volver a concursar con nosotros si no definimos qué les vamos a ofrecer.

¿Por qué los ha visto desesperados?

Porque empiezan a un mes y medio a levantar candidaturas. De verdad me parece un error de proporciones.

¿Hablando de candidaturas, tiene definido ya su respaldo en la interna DC?

Creo que por el momento que atraviesa mi partido, quien lidere a la DC no puede ser nadie que sea parte de la crisis en la que nos encontramos, así de claro.

¿Quiénes serían parte de las crisis?

No voy a dar nombres.

Es que hay tres candidatos.

Está bien pero estoy hablando en términos generales. Hoy día no puede ser candidato a la presidencia del partido nadie que haya tenido un rol en las definiciones que nos llevaron a la situación en la que nos encontramos. No he dado nombres y no los voy a dar. Creo que es una primera premisa. Segundo, creo que quien lidere este proceso tiene que ser alguien que logre, y en eso estamos los senadores democratacristianos electos, quien logre concitar la mayor unidad posible de objetivo. Me cargan los motes de si es más de izquierda, de derecha, más progresista, menos progresista, creo que eso nos ha matado. Tiene que ser alguien que concite la unidad y el respeto partidario. Y que sea validado por sus pares y por la militancia. En ese escenario, tengo la convicción profunda de que lo que ha planteado Francisco Huenchumilla tiene sentido: unidad partidaria, de objetivos, poner un propósito al partido. Que tiene que ver con concursar ante la ciudadanía con los temas que mueven hoy día al mundo, modernización, ciencia y tecnología, desarrollo, inclusión, mujeres, regiones (...) En ese escenario me encantaría que esto finalmente se traduzca en que tengamos un Francisco Huenchumilla liderando un proceso, porque creo que él tiene el prestigio, la estatura moral, de trayectoria para hacerlo. Creo que reúne condiciones que de verdad ayudan a este proceso, porque es un proceso, de sanar heridas, de que cicatrice, de que no queden infectadas las heridas.

El exministro Undurraga busca encabezar el partido. ¿Usted cree que él sería un buen complemento en la candidatura de Huenchumilla?

Me encantaría que Alberto fuera parte de ese proyecto. Yo se lo pregunté a él de hecho. Le tengo un cariño enorme a Alberto, se la jugó en el gobierno anterior, hizo un tremendo trabajo, ha sido alcalde. Me encantaría que estuviéramos, que lográramos todos sumar voluntades y espero que esto decante así.

Huenchumilla piensa distinto dentro de la DC a quienes están en reflexión sobre su militancia en la DC, como Gutenberg Martínez, Soledad Alvear, Jorge Burgos...

Mira. Yo el 22 de marzo pensé seriamente en irme del partido, cuando mi hermano hizo pública su renuncia a la DC. Y no lo hice. Sé que para mi hermano fue una decisión súper dolorosa, que venía masticando y analizando hace mucho tiempo, y no lo hice porque entendiendo lo que hizo mi hermano, y acompañándolo, y desde ya anuncio que voy a ser su jefa de campaña en la senatorial que espero realice, aunque me echen de mi partido por aquello, es mi partido de toda la vida. Entré a militar a los 14 años. Es el partido de mis padres, el partido en el que creo, el partido donde encuentro mis convicciones representadas. Pero es en los momentos difíciles donde debemos remar hacia el mismo lado, donde se prueba el coraje y no se abandona el barco.

¿Prefirió entonces dar la lucha desde dentro?

Yo decidí estar aquí.