Dormir poco provoca aumento de peso: estas rutinas te harán tener un sueño reparador

Un sueño reparador puede tener grandes impactos en nuestra salud física y mental. Foto: Getty Images.

Si estás pasando por un periodo de dormir pocas horas no solo se verá afectada tu calidad del sueño, sino que también podría conducir al aumento de peso. Por ello, una especialista entregó una serie de sugerencias para promover un buen descanso.


En el día a día, muchas veces priorizamos hacer actividades de los estudios o la vida social y familiar, en lugar de dedicar esas horas al descanso personal.

Si bien un buen sueño no siempre se puede conseguir por factores como los anteriores, es necesario que procuremos conseguirlo lo más a menudo que podamos. Esto, dado que contar con un sueño reparador puede tener grandes impactos en nuestra salud física y mental, sea para bien o para mal.

Distintos estudios científicos han abordado la relación entre dormir pocas horas y el aumento de peso. En parte, esto se debe a que las funciones biológicas del cuerpo sincronizan lo que hay que hacer en el día y la noche, es decir, los ciclos de sueño y vigilia.

Cuando el ritmo circadiano sufre modificaciones, se altera también el reloj biológico de cada uno.

Romina Pereiro, nutricionista, indicó al medio Infobae que la falta de horas dedicadas al sueño conduce a no tener un descanso reparador y esto impacta directamente en el metabolismo.

“El ritmo metabólico disminuye un 8% cuando dormimos entre 5 y 6 horas, y esto afecta, tiene un impacto grande en nuestro peso corporal, porque está comprobado que la privación de sueño puede hacer que se aumenten entre 4 y 5 kilos al año”, sostiene.

Tal como señala la especialista, las investigaciones científicas han concluido que las personas que dedican menos de 6 horas al sueño presentan más de posibilidades de padecer obesidad.

Un descanso reparador depende de varios factores.

Por ejemplo, un estudio de Clínica Mayo de EE.UU. identificó que las personas que tenían un ciclo del sueño irregular durante un periodo de dos semanas, comenzaron a presentar incremento de peso y un aumento hasta del 11% en la grasa visceral dentro del abdomen.

“La grasa prefiere acumularse subcutáneamente, o bajo la piel. Pero cuando el sueño no es adecuado, parece que la grasa se asienta en un compartimento visceral más peligroso”, dijo Virend Somers, autor principal del estudio.

En caso de que estés pasando por este problema, la nutricionista Romina Pereiro entregó una serie de recomendaciones al medio Infobae para ayudar a solucionarlo.

Lo que debes hacer para un buen descanso

Al iniciar el proceso de un descanso reparador, la experta indica que el primer paso es ordenar las rutinas diarias que tenemos. Al dormir poco también baja el ritmo del metabolismo, lo que produce que el cuerpo gaste menos energía y la ahorre.

La privación del sueño conduce a que el cuerpo sienta la necesidad de consumir alimentos con más calorías y azúcares de las que se necesita. También se ve alterado el hambre y la saciedad, porque como pasamos más horas en pie, eso nos lleva a sentir que tenemos que comer durante todas las horas que seguimos despiertos.

“Existen hormonas, la grelina y leptina, que se ven afectadas y también va a influir en este tejido adiposo que va a ir en aumento. Y, además, como dormimos poco, vamos a estar muy cansados y, por lo tanto, nos vamos a mover menos, va a aumentar el sedentarismo”, expresó Pereiro.

El primer paso para dormir bien es ordenar las rutinas diarias que tenemos.

Poco antes de acostarse, se pueden aplicar ciertos hábitos pequeños pero que pueden cambiar por completo el descanso posterior: la especialista lo llama “higiene del sueño”.

“Seguramente, va a favorecerte en ese tiempo previo a acostarte. Lo más importante es que trates de acostarte a horarios regulares. Mucha gente que se queda viendo la tele o leyendo el celular, se les pasa la hora y no se dan cuenta. Muchas veces, podemos utilizar alarmas para ir a dormir como hacemos para despertarnos, lo hacemos para ir a dormir hasta que nuestro cuerpo se va acostumbrando”, dice.

Pereiro también enfatiza en lo fundamental que es no consumir bebestibles con cafeína después de las 6 de la tarde. Esto incluye el café, el té, el mate, las energéticas y la bebida tipo cola; ya que éstas podrían afectar directamente en la calidad del sueño.

Por último, la nutricionista recomienda no hacer ejercicio físico poco tiempo antes de dormir, así como también prestar atención a los elementos distractores que están a nuestro alrededor cuando estamos en la cama, como las luces artificiales.

“Acuérdate siempre de dejar muy lejos los controles remotos para que no puedas prender la tele. Esa pequeña luz que a veces queda prendida cuando nos quedamos dormidos viendo tele o el celular, pueden interferir en la calidad de nuestro sueño”, remarcó.

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