El ayudante técnico del Diez en el Lobo optó por apartase del club platense después del deceso del astro. Este sábado, enfrentan a Vélez Sarsfield.
27 nov 2020 11:22 AM
El ayudante técnico del Diez en el Lobo optó por apartase del club platense después del deceso del astro. Este sábado, enfrentan a Vélez Sarsfield.
El equipo blaugrana, cuya camiseta defendió el Diez en la década de los 80, le rindió tributo a su memoria con un minuto de silencio antes del entrenamiento de este viernes.
“Fue la consagración de un genio”, dice el conocido periodista y locutor uruguayo en el prólogo de México 86, el libro donde Diego Maradona talla y detalla aquella cita proverbial del deporte global, la que a la postre sería “su” Mundial. “Era un asunto de ser o no ser, ante la mirada de todo el mundo”, advierte el hombre que narró en vivo, aquel domingo 22 de junio, en la olla del Azteca, la hazaña del mejor futbolista argentino.
Si Diego ha sido o no el mejor futbolista, si tiene los méritos y su vida privada se los quita, no está claro y si se le compara con grandes de otras disciplinas, la válida y eterna discusión se pone entretenida.
Aglomeraciones, aplausos a las 10, caravanas, lágrimas, colas de tres kilómetros, policías, corridas, balas de goma, gases lacrimógenos, piedrazos, heridos, caras de miedo, multitud... Las emociones y también el caos se mezclaron en el velatorio de Maradona y en el cortejo hasta el cementerio. Argentina le dijo adiós a su propio modo excesivo y desordenado.
Hincha de Nacional de Montevideo, el escritor uruguayo era un fanático del fútbol y del deporte en general. De hecho, en su obra narrativa ha escrito cuentos sobre el balompié. En 2008, un año antes de su fallecimiento, fue más lejos y llevó su admiración por el “10” a la poesía y compuso “Hoy tu tiempo es real”, con métrica de soneto.
El "10", que hace algunas semanas celebraba sus seis décadas, hoy conmueve al mundo entero con su partida. Una vida que mezcla la gloria deportiva, los excesos fuera de la cancha y su afición por los deportivos.
Una insuficiencia cardíaca aguda que le generó un edema de pulmón, le quitó la vida al astro argentino. Una vida llena de vicios, influyó en el deceso.
El músico argentino publicó una sentida carta en sus redes sociales, donde despide al futbolista y recuerda conversaciones y anécdotas juntos. "Siempre me alucinó tu humildad", dice allí.
La hazaña que el Diez consiguió esquivando a medio equipo rival para anotarle, no solo elevó al astro transandino a la leyenda. Junto con él, el relator uruguayo, quien narró la obra de arte, pasó a ser parte del inconsciente colectivo. Ahora Víctor Hugo Morales llora su partida.
Durante los días del Pibe de oro en una clínica de rehabilitación en Cuba, a comienzos de los 2000, quedó claro que el tratamiento no funcionaba y que incluso su condición empeoraba cada día más. Fue entonces, que se gestionó el traslado del ídolo hasta el centro de rehabilitación que el músico tenía en otra isla del Caribe. Una historia que incluso cuenta una conversación entre ambos hombres y se mantuvo en silencio hasta hoy.
El arquero de la selección de Inglaterra que enfrentó a Argentina en 1986 se despidió de su verdugo en el Mundial de México.
A través de Instagram, Matías Morla, el asesor más cercano del fallecido astro acusa negligencia en el momento de evitar el trágico desenlace.
Luego que el exfutbolista quedara inconsciente en una parcela en Punta del Este, un joven doctor se trasladó para prestarle auxilio, pero el círculo íntimo del “barrilete cósmico” quería mantener en reserva el motivo de su “descompensación”. La serie de Amazon, Sueño bendito —que se encuentra en pleno rodaje de su primera temporada—, abordará tanto este acontecimiento como otros momentos clave del astro del balompié.
Miles de personas se han congregado para estar con el 10 en el velorio.