Lautaro Carmona: “El PC tiene que jugar un rol de partido comprometido con transformaciones y aportar a que eso esté presente”

Lautaro Carmona

Representando al partido más grande de Apruebo Dignidad, el secretario general del PC señala que "ganó aquí un proyecto que no es ninguna polarización que no sea justicia social (...) Y desde esa perspectiva, este proyecto es de mayorías".


En medio de los festejos por el triunfo de Gabriel Boric, el secretario general del Partido Comunista (PC), Lautaro Carmona, analiza los distintos factores que llevaron a la amplia ventaja que sacó el presidente electo por sobre José Antonio Kast.

El electorado -dice- percibió que un eventual gobierno de Kast “se planteaba revertir las expectativas de transformaciones que tiene el pueblo de Chile”. Y sobre los apoyos “claves” que recibió el candidato en la recta final de figuras de la ex Concertación, como Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, asevera que “no soy el encargado de darle decibeles a cuál fue un aporte mayor o menor”.

¿Cómo lee este triunfo tan amplio por parte de la candidatura de Gabriel Boric por sobre José Antonio Kast?

Me parece una gran enseñanza, una gran lección de la conciencia democrática del pueblo de Chile. Este triunfo tan contundente se explica porque la ciudadanía reaccionó frente a una propuesta bastante subversiva, sediciosa y fascistoide. Y ante eso, operó un sentimiento y una mentalidad democrática. A conciencia, se optó por la candidatura de Apruebo Dignidad que representa Gabriel Boric, y eso explicaría por qué este triunfó. No hay una magia que no sean los grandes temas que se instalaron en los medios de comunicación a partir de las propuestas, afirmaciones, discusiones, foros, paneles, que era una exagerada disposición que cuestionaba los avances democráticos a la fecha, pero sobre todo revertía y se planteaba revertir lo que las expectativas de transformaciones que tiene el pueblo de Chile.

¿Cómo se enfrentará el desafío de incorporar visiones distintas a las de Apruebo Dignidad? Hoy hay un voto que fue más transversal, ¿cómo se traduce eso en el desafío que tienen ustedes de ser el gobierno de todos los chilenos?

En primer lugar, en lo que plantee Gabriel Boric como futuro Presidente de Chile, y luego lo que planteen colectivamente los partidos políticos de Apruebo Dignidad, movimientos políticos, y en eso habrá sabiduría, coherencia. Habrá responsabilidad para con las expectativas, de eso no tengo ninguna duda.

¿Se imagina un Apruebo Dignidad ampliado con partidos como el PS, PPD, para sustentar este proyecto político?

La verdad es que hay una propuesta programática que estuvo en el debate, que estuvo en la discusión y no soy yo el que va a indicar lo que deban hacer otros partidos que no sean ellos mismos respecto a esa propuesta programática.

¿Usted cree que la moderación en el discurso de Gabriel Boric le sirvió para obtener este triunfo amplio?

Lo que le sirvió fue una claridad frente a lo que fue la explicitación de un planteamiento con rasgos claramente antidemocráticos que ninguneaban lo que es la lucha de los derechos del pueblo. Eso fue lo primero de lo primero, lo que más pesó en la conducta electoral que tuvo un porcentaje tan alto de chilenas y chilenos, sobre todo quienes no votaron en esta primera vuelta y ahora sí fueron a votar.

¿Y los apoyos de Ricardo Lagos, Michelle Bachelet?

Todos los aportes contribuyen, no tengo ninguna duda. No soy el encargado de darle decibeles a cuál fue un aporte mayor o menor. Yo quiero quedarme con lo que en este momento, un momento donde los temas los resuelve la soberanía ciudadana, jugó como desequilibrante esa conciencia democrática de ese pueblo que enfrentado a este dilema (versus Kast) se pronunció en forma inequívoca y contundente.

¿Qué rol debe jugar el PC en el próximo gobierno?

En el gabinete lo define el presidente electo. Y en el proyecto, el PC tiene que jugar un rol que juega un partido comprometido con transformaciones y aportar desde esa perspectiva, a que esa dimensión esté muy presente.

Pese a la amplitud de la diferencia que hay en los resultados, la gente que votó por Kast tenía una visión de país muy distinta. ¿Cómo se garantiza que ese gobierno también va a ser para esos chilenos?

Yo creo que ganó aquí un proyecto que no es ninguna polarización que no sea justicia social, que no sea la expresión que estuvo planteada en el plebiscito a favor de una nueva Constitución, que no sea la necesidad que la gente tiene de que las políticas públicas que vayan en la dirección de atender esos derechos y esas necesidades. Y desde esa perspectiva, este proyecto es de mayorías.

¿El resto se tendrá que someter a esa mayoría?

Yo no estoy diciendo que se vaya a someter. La democracia no implica sometimiento. Uno tiene el legítimo derecho a mantener una mirada.

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