Deuda tributaria del fútbol chileno supera los US$ 32 millones

La reforma al Código del Trabajo en 2003 y la posterior promulgación de la Ley 20.019 de Sociedades Anónimas Deportivas Profesionales (SADP), en 2005, no solo implicó un cambio rotundo en la administración y dirección del fútbol nacional, sino que también abrió una gran caja de Pandora que, a la fecha, aún no es posible cerrar: la deuda tributaria de los clubes con el Fisco.

Esto, debido a que las modificaciones laborales implicaron nuevas reglas en la relación contractual de los jugadores de fútbol profesional con sus empleadores, exigiendo el pago de impuestos a la renta por concepto de derechos de imagen y premios, entre otras materias. Hasta entonces, sólo tributaban las remuneraciones de los trabajadores.

En ese contexto, los cálculos arrojaron cuantiosas moras en la mayoría de los clubes, quienes, sumados a otras deudas, terminaron incluso con la quiebra de algunos, como Colo Colo y la U. de Chile.

Bajo el alero de la ley de las SADP, la Tesorería General de la República otorgó la posibilidad a las instituciones deportivas de suscribir un convenio de pago de dicha deuda, considerando condonaciones de intereses y multas, pacto que firmaron 17 instituciones, entre las cuales hubo dos concesionarias (Blanco & Negro y Azul Azul) que deben pagar en calidad de codeudor solidario , 11 sociedades anónimas deportivas profesionales y cuatro clubes que prefirieron seguir siendo corporación de fútbol.

La deuda tributaria total de los clubes al momento en que se suscribieron los convenios, 2005 y 2006, alcanzó los $ 31.520 millones (unos US$ 47 millones al tipo de cambio actual). Sólo reajustada por la inflación acumulada a la fecha, esa cifra superaría los $ 48.100 millones (US$ 72 millones).

El acuerdo implicaba que los morosos debían pagar anualmente una cuota correspondiente al 3% de sus ingresos o un 8% sobre sus utilidades (el monto mayor), al 30 de abril de cada año.

En este sentido, según información entregada por Tesorería vía Transparencia, al presente ejercicio se han pagado $ 9.820 millones al Fisco, equivalentes a más de US$ 14,6 millones. De esta forma, la "deuda histórica del fútbol" hacia el Fisco llegaría hoy, al menos -sin considerar un ajuste por inflación- a los $ 21.699 millones, equivalentes a US$ 32 millones aproximadamente. Aún más, es monto también se incrementaría al considerar que el convenio suscrito con los clubes estipula un interés anual de 5,4% sobre el saldo.

En este periodo, destaca el pago de Blanco & Negro a la Tesorería, que tras cancelar su última cuota hace algunas semanas, ha pagado un total de $ 4.217 millones, equivalente a poco más de US$ 6,3 millones.

En tanto su archirrival, Azul Azul, ha cancelado desde 2008 la suma de $ 3.619 millones, más de US$ 5,4 millones.

En ambas instituciones, los montos cancelados año tras año, corresponden al 3% de sus ingresos, de acuerdo a lo exhibido en sus respectivas memorias.

Por su parte, otros clubes que han pagado montos importantes son Cobreloa ($ 668.930.801), Everton ($ 188.603.190) y Unión Española ($ 408.301.074), aunque en este último caso la Tesorería informó en 2014 que la institución hispana saldó su deuda, incluyendo la condonación de intereses.

Asimismo, la información de la entidad recaudadora destaca que tanto Unión San Felipe como la Universidad de Concepción saldaron sus deudas respectivas. En el caso del club de la VIII Región, la buena campaña de 2007 (finalistas) y el título de la Copa Chile en 2008-2009 permitieron al club cancelar todo lo adeudado.

Otros casos más complejos son el de Provincial Osorno, club que fue desafiliado del fútbol profesional en 2012 por la mora de más de $ 200 millones de una cuota de inscripción, por lo que se caducó su convenio. Hoy, los sureños funcionan a través de otro nombre. Historia similar a la de Deportes Concepción, que fue desafiliado el año pasado por el impago de sueldos y deudas con la ANFP.

Respecto de la Universidad Católica, club controlado por Cruzados SADP, Tesorería reveló que no suscribió el convenio de pagos de acuerdo a lo establecido a la ley.