En apenas 9 minutos el Elche se imponía en casa por 2-0 al Betis, con Claudio Bravo en el arco y con un Manuel Pellegrini evidentemente molesto por el mal inicio de sus dirigidos. La escuadra de Enzo Roco, colistas absolutos del torneo con apenas nueve unidades, necesitaban urgente un triunfo, y tuvieron un inicio soñado. Sin embargo, la expulsión de Lisandro Magallán a los 57′ derrumbó todo para los locales. Borja Iglesias y Juan Miranda igualaron rápidamente el marcador para un 2-2 que fue la antesala de una pesadilla.

A los 85, un balón le dio en la mano a Enzo Roco y el juez cobró penal y tarjeta para el defensa formado en la Universidad Católica. Los del Ingeniero tenían la oportunidad de dar vuelta el partido, pero el meta Edgar Badia le atajó el lanzamiento a Borja Iglesias y le dio vida al Elche.

Pero, lamentablemente, el jugador nacional fue protagonista de una insólita situación. A los 90+3′ intentó a bloquear un remate con el brazo abierto y el árbitro sancionó un nuevo penal para el Betis. Para colmo, se ganó su segunda amarilla y acabó expulsado. Willian José marcó el definitivo 3-2 y Roco terminó como el gran villano de la jornada en una escuadra que se hunde en la tabla de posiciones de la Liga de España.