Neymar dejó el Barcelona para partir al PSG con un objetivo claro: ser el mejor del mundo. El brasileño, cansado de vivir a la sombra de Lionel Messi en España, aceptó transformarse en el fichaje más caro de la historia y cambiar de camiseta, en una operación que remeció el fútbol mundial a comienzos de temporada.

Y esa ambición por ser el número uno implica, además de ganarlo todo con el equipo, sumar distinciones individuales, entre las que destaca, por cierto, el Balón de Oro. El ex Santos parece tener plena consciencia de aquello y, de hecho, en su contrato con el cuadro parisino estipuló una cláusula que le beneficiará cada vez que obtenga eventualmente la distinción. De quedarse con el premio que condecora al mejor futbolista del planeta de la temporada, el delantero cobrará 3 millones de euros, según reveló durante esta jornada el diario galo Le Parisien.

De acuerdo a la publicación, el club le pagará dicho monto cada vez que gane el premio en el tiempo que dure su contrato, que expira en junio de 2022.

El elenco francés pagó 222 millones de euros al Barça para hacerse con los servicios del jugador, quien ya ha sido finalista por el premio que, durante los últimos diez años, se han repartido entre Messi y Cristiano Ronaldo.