Poco más de mil kilómetros recorre la Pacific Coast Highway (PCH), en California, Estados Unidos, famosa por constituir una de las rutas costeras más bellas del mundo. Escenario ideal, por tanto, para conocer el nuevo Volvo S60, el primer auto del fabricante sueco construido en Norteamérica.

Parte de la costa californiana, pero también montañas y valles, incluyó el trazado preparado por Volvo para mostrar su última creación, que busca plantarle cara a modelos como el BMW Serie 3, Mercedes-Benz Clase C y Audi A4.

Construido en la nueva planta de Charleston, en Carolina del Sur, el nuevo S60 utiliza la ya conocida plataforma modular escalable SPA, que comparten sus hermanos mayores de la serie 90, además del XC60 y V60. Así, la tercera generación del sedán sueco se presenta más larga y más baja que su antecesora, ofreciendo una mayor habitabilidad y espacio de carga. Alcanza los 4.761 mm de largo, 2.040 mm de ancho, 1.431 mm de alto y 2.872 mm entre ejes. Su maletero, en tanto, anota 442 litros.

Estéticamente, adopta ese estilo minimalista escandinavo que le ha valido varios reconocimientos a Volvo en el mundo. Luce líneas limpias y muy modernas, que no ocultan su parecido con el resto de la gama actual. El frontal es prácticamente idéntico al del V60 -con la ya típica barra de led en forma de "Martillo de Thor"-, aunque con algunos detalles diferenciadores en la parte inferior del parachoques.

De perfil, si bien recuerda al S90, apuesta por unas formas más deportivas, con una estilizada caída del techo, que acaba en una zaga que vuelve a montar los grupos ópticos en forma de bumerán.

Diseño elegante, ordenado y pulcro que se replica en el interior, el cual, sin lugar a dudas, ofrece uno de los niveles de calidad más altos del segmento. Sobresale por una generosa consola central, con una gran pantalla táctil vertical de nueve pulgadas -compatible con Apple CarPlay y Android Auto- y un centro de mandos, que aúna la caja de cambios, el botón de partida, el selector de tipos de conducción y el freno eléctrico. Se remata impecablemente con molduras decorativas que pueden ser tanto metálicas como de maderas nobles.

Por supuesto, viene cargado de tecnología en todos los ítems, desde confort hasta seguridad, disponiendo del último avance de los suecos en materia de conducción semi-autónoma: el sistema "Pilot Assist", el cual deja el manejo en autopista -hasta una velocidad punta de 130 km/h- en manos del propio vehículo, actuando sobre la dirección, aceleración y frenado.

El nuevo S60 no solo es el primer Volvo producido en Estados Unidos, sino también es el primer modelo del fabricante sueco que elimina el diésel de su oferta de motorizaciones, ofreciendo únicamente variantes a gasolina, además de una híbrida enchufable.

Las opciones bencineras son el T5 y T6, ambos bloques de 2.0 litros, con 250 y 316 Hp, respectivamente. El primero de ellos, con turbo y tracción delantera; en tanto que el más potente combina el turbo con un supercargador y tracción integral. Los dos están gestionados por una caja automática de ocho marchas.

La versión tope de la gama es el T8 Twin Engine AWD (con la misma caja), cuyo sistema de motorización híbrida -gasolina más eléctrico, con 400 Hp y 640 Nm totales- funciona igual de bien para ahorrar combustible, como para ir más rápido.

Un sedán de sello propio que busca hacer olvidar a los alemanes.