La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos en Medio Oriente (UNRWA) advirtió este jueves que la situación a la que se enfrentan las personas que atienden ha empeorado con la pandemia. Razón por la que solicitaron US$1.500 millones a la comunidad internacional de donantes para continuar con su labor humanitaria en 2021.

Según manifestó la UNRWA en un comunicado, su asistencia, que consiste en la provisión de bienes y servicios básicos, así como la protección y desarrollo humano de los palestinos refugiados, supone “una inversión en la estabilidad de Medio Oriente”.

Asimismo, el organismo insistió en que se trata de un trabajo “necesario en tanto no haya una solución justa y duradera” a la situación de los refugiados en territorios palestinos ocupados.

En este sentido, se destacó la partida de US$231 millones en asistencia de emergencia para responder a los efectos devastadores del bloqueo israelí en Gaza.

La petición de fondos del organismo ocurre tras una crisis financiera sin precedentes en 2020.

Para mitigar los efectos del Covid-19

La UNRWA llamó a los donantes a aportar con los recursos que hacen falta y así “salvar los servicios humanitarios en riesgo y unir esfuerzos con el objetivo de desarrollar colectivamente una visión sostenible y progresista” de esa dependencia.

En concreto, el plan de trabajo de la agencia para este año contempla el apoyo a 1,23 millones de refugiados palestinos que sufren inseguridad alimentaria mediante la distribución de víveres o asistencia en efectivo.

Además, mantendrá la iniciativa “dinero por trabajo” para mitigar la pérdida sustancial de medios de vida, específicamente en Gaza, y continuará el apoyo educativo de emergencia, que beneficiará a más de 330.000 estudiantes de la UNRWA en todos los territorios palestinos ocupados.

“Parte del dinero se destinará a la mejora de los campamentos y otras infraestructuras básicas de carácter público”, añadió.

Asimismo, el organismo señaló que también garantizará el “acceso continuo a la atención de salud primaria, secundaria y terciaria para los refugiados palestinos en Gaza y Cisjordania; mantendrá las medidas de prevención por el Covid-19; responderá a la violencia de género y las preocupaciones sobre la protección infantil; y supervisará la protección, especialmente en Cisjordania”.

En cuanto a la atención sanitaria, la UNRWA especificó que sus centros de salud “atenderán más de cinco millones de visitas de pacientes, continuarán la modalidad de telemedicina y asegurarán la cobertura de inmunización básica de todos los niños refugiados palestinos, así como el acceso a la salud materna, reproductiva y mental”.