Con el 98,04% de las mesas escrutadas, el candidato oficialista por el partido Unión por la Patria, Sergio Massa, sorprendió y lideró la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Argentina, obteniendo el 36,65% de los votos, equivalentes a más de 9 millones 594 mil preferencias.

Al actual ministro de Economía del país vecino, lo secunda el ultralibertario Javier Milei, del pacto La Libertad Avanza, quien alcanza un 30,01% de los votos, correspondientes a más de 7 millones 856 mil apoyos.

Con este resultado, ambos candidatos deberán definir la presidencia en la segunda vuelta, a realizarse el próximo domingo 19 de noviembre.

En este sentido, para evitar el balotaje, el ganador de las elecciones debía obtener más del 45% de los votos o del 40% y una diferencia de al menos 10 puntos porcentuales sobre el segundo, escenario que ningún postulante estuvo en condiciones de lograr.

En tercer lugar, y muy atrás en las preferencias, se posiciona la conservadora Patricia Bullrich, candidata del partido Juntos por el Cambio, quien obtuvo un 23,83% de los votos.

El futuro presidente deberá lidiar con una economía en estado crítico: la inflación alcanzó el 138% anual, la pobreza llegó al 40% y las arcas del banco central se encuentran vacías. Además, tendrá que afrontar una deuda de 44.000 millones de dólares contraída en 2018 con el Fondo Monetario Internacional (FMI).