Una de las víctimas de uno de los secuestros más espectaculares perpetrados por las FARC está siendo acusado de haber organizado el plagio que se saldó con la muerte de once diputados colombianos.

Se trata de Sigifredo López, uno de los "12 diputados del Valle del Cauca" capturados por el grupo insurgente en pleno centro de la capital de ese departamento, Cali, hace ya más de 10 años.

Los once compañeros de cautiverio de López fallecerían en confusas circunstancias en junio de 2007, según las FARC como resultado de fuego cruzado durante un fallido intento de rescate por parte del ejército, según las autoridades asesinados a sangre fría por el grupo guerrillero.

Pero López, quien dijo haber sido separado de sus colegas poco antes del ataque por motivos disciplinarios, sería liberado dos años más tarde.

Y ahora la Fiscalía colombiana está acusando al diputado vallecaucano de coautoría en el secuestro y asesinato de los otros parlamentarios, así como por la muerte del oficial de policía que intentó evitar el plagio.


VIDEO INCRIMINADOR

La noticia cayó como una bomba en Colombia, llegando incluso a pelear en atención con las investigaciones sobre el atentado con bomba del martes.

"Si la acusación contra Sigifredo López es cierta, es una infamia de él. Si es falsa, una infamia contra él. En ambos casos pierde el país"

Alberto Salcedo Ramos

Entrevistados por medios locales los familiares de los diputados muertos dijeron que les costaba creer que López estuviera implicado y pidieron a las autoridades que se apuraran a esclarecer el caso.

La prueba reina de la fiscalía parece ser un video, parte del archivo del excabecilla de las FARC Alfonso Cano, en el que se ve a un hombre explicando como se podría secuestrar a los "diputados del Valle".

Pero el rostro del hombre, que según la fiscalía es el propio Sigifredo López, no se puede apreciar con claridad.

La supuesta participación del diputado en el plagio, para el que guerrilleros de las FARC entraron a la sede de la Asamblea Departamental del Valle del Cauca disfrazados como miembros del ejército colombiano, ya había sido denunciada en 2007 por un guerrillero desmovilizado.

Pero el reinsertado luego retractó su testimonio y toda Colombia dio por buena la versión de López, quien dijo haberse salvado "por insubordinado".

"INFAMIA"

Según López, pocos días antes de la muerte de sus colegas, los guerrilleros decidieron aislarlo y encadenarlo a un árbol por haberles reclamado mejor trato.

"A un guerrillero le pareció que estábamos hablando muy duro. Nos dijo: '¡hijueputas, dejen la bulla!'. Y yo le respondí: 'mire señor, no nos hable así'. Eso fue todo", contaría López varios años más tarde.

Luego de su liberación, López anunció que pensaba demandar al Estado colombiano por los perjuicios sufridos durante sus años de secuestro.

Y en octubre del año pasado se postuló como candidato a la alcaldía de Cali por el Partido Liberal, aunque luego renunció a la candidatura en favor del eventual ganador de los comicios, Rodrigo Guerrero.

Mientras llega el juicio, el Partido Liberal colombiano ya anunció la suspensión del exdiputado.

Y en caso de ser encontrado culpable de los delitos de homicidio agravado, toma de rehenes, rebelión y perfidia por lo que está siendo acusado, López podría ser condenado a un mínimo de 40 años.

Por lo pronto, la consternación causada por las acusaciones en contra de López las resumió como nadie en su cuenta de Twitter el cronista Alberto Salcedo Ramos.

"Si la acusación contra Sigifredo López es cierta, es una infamia de él. Si es falsa, una infamia contra él. En ambos casos pierde el país", escribió Salcedo Ramos.