Francisca Imboden: "Lo de Canal 13 era una crisis que no se ha estabilizado"

Francisca Imboden se está reencontrando con el equipo con que trabajó durante buena parte de sus trece años en TVN. Pero la actriz, que hasta el 31 de enero tiene contrato con Canal 13, no está regresando a la señal estatal. Es la nueva incorporación del área dramática de Mega, donde participará de la próxima teleserie vespertina.

La actriz deja el canal de Luksic donde participó en dos teleseries nocturnas y la serie El hombre de tu vida. A partir de febrero, volverá a trabajar junto a la directora María Eugenia Rencoret, esta vez en las instalaciones del grupo Bethia. "La evolución de esta área en un año ha sido increíble", afirma Imboden.

¿Por qué decidió dejar Canal 13 para aterrizar en Mega?

Yo estaba tranquila en el 13. Se había hablado con Mega de la posibilidad de cambiarme, pero tenía proyectos fijos en el 13, entonces quedó sólo en ideas. Pero siempre me pareció interesante cómo se armaba este nuevo espacio. Y luego pasaron cosas que me hicieron ver a Mega como una posibilidad para mí. En el momento en que a Alberto Gesswein lo sacaron del área dramática en Canal 13, cambió todo. Se empezaron a caer los proyectos y hubo menos espacio.

¿Cómo vivió el mal momento del área dramática en Canal 13?

Siempre he creído que las cosas tienen ciclos, y hay que saber sortearlos. Pero, la verdad, sentí un punto de inflexión cuando se fue el "Tito" (Gesswein). No entendí muy bien para dónde iba la máquina. Ahí lo sentí más como una crisis, que no se ha logrado estabilizar. Creo que todas las áreas sufren estas crisis, pero lo importante es cómo salir. Para eso hay que fijar metas a largo plazo, pero a veces se pierde eso buscando tanto el éxito inmediato. Creo que de todos estos procesos salen cosas buenas, y espero que mejore todo. No le sirve ni a la industria, ni a los actores, ni al público, que sólo a un canal le vaya bien.

¿Cómo es la experiencia de llegar a un canal nuevo, pero con un equipo con el que ya trabajó?

Como que vuelvo a una refundación interesante. Son bonitos esos ciclos en la vida. Son muchos de los mismos que estaban en TVN, pero es un aire distinto, porque se está creando algo importante. Siento que hay una confianza por parte de Mega, y eso genera un buen ambiente para uno. Es rico unirse a este barco que está remando a descubrir América (se ríe).

¿Por qué cree que las áreas dramáticas de los otros canales han vivido un año tan complejo?

A nivel general en la sociedad, nada de lo que funcionaba antes, funciona hoy. Todo está en una etapa de cambios. Los canales están buscando una fórmula, un modelo que funciona, pero no existe eso. Por eso yo creo que se benefician más los lugares que se la juegan por probar cosas nuevas. Funcionó mucho tiempo estirar el chicle de una forma de hacer tele, pero esa forma ya no funciona. La gente es muy diversa hoy en día. Uno no le puede dar en el gusto a todo el mundo, porque ese concepto de "todo el mundo" ya no existe. Hay que volver a relajarse y contar la historia que uno quiera contar, no obsesionarse con llamar la atención. Hay que ser, no "tratar" de ser.

¿Tiene más proyectos para 2015?

Tenía unas obras de teatro fijadas para el próximo semestre, pero voy a tener que aplazarlas para el segundo, porque la verdad quiero dedicarme ciento por ciento a esto. A estas alturas de mi carrera he aprendido que no soy pulpo, y no puedo hacer mil cosas a la vez. Aún tiene que emitirse mi último trabajo en Canal 13, Príncipes de barrio, y tengo mi programa en la FM Dos también, y creo que con eso y la teleserie, es suficiente.