Kristel Köbrich se puso un desafío para los Odesur: conseguir la mayor cantidad de medallas para Chile, aunque eso signifique competir en pruebas en las que no está acostumbrada y cumplir un exigente calendario.

Por eso, la "Alemana" se presentó la semana pasada en los Juegos Bolivarianos de Perú, una cita sin gran nivel, pero que programó la natación de la misma manera como será en Santiago 2014, es decir, en cuatro días. El balance fue positivo: un oro, otras tres medallas, un récord de torneo y dos marcas chilenas, en 200 metros espalda y 200 combinados (ver tabla).

Sobre su propio doble logro, la nadadora es más bien crítica, pues no considera positivo que una fondista bata tan fácilmente marcas de distancias cortas. "Los récords que obtuve demuestran que el nivel en Chile no está del todo bien. Es una realidad, tenemos que estar conscientes de eso, los chicos tienen que estar conscientes de eso, pero no puede ser", analiza.

La "Alemana" agrega que "algunos récords tenían muchos años y quedan otros que tienen varios años también. Pero aún es tiempo, estos chicos (indica a otros integrantes de la selección) son jóvenes, el Odesur es para mayores, pero no se nos puede pasar el tren".

Daniel Garimaldi, técnico de Köbrich y de la Selección, coincide en que "el nivel no está bien" y agrega que "Kristel rompió esos récords fácilmente. Los tiempos no sirven para hacer algo grande en los Odesur, pero con trabajo se pueden mejorar".

Vienen redefiniciones

Respecto de las conclusiones del nutrido calendario en Perú, la deportista asegura que "nos gustó hacer varias pruebas. Obviamente quedé súper cansada, pero era la idea".

El DT explica que posiblemente Köbrich no dispute tantas distancias en Santiago 2014, sino que privilegie las que puede ganar. "Por lo que vimos en Perú, tiene posibilidades de ganar más de un oro en Santiago, por lo que vamos a redefinir qué hacer. Aunque podría hacer siete podios, es más valioso que gane tres oros".

Además, en los Odesur la chilena sumará postas y aguas abiertas, que no hizo en los Bolivarianos.

Köbrich concluye que "no quiero presentarme a una prueba para quedar séptima u octava, no porque no sea bueno, sino que porque lo único que suma son las medallas". La definición se tomará en febrero.