SEÑOR DIRECTOR

Ante las ya incontables, sistemáticas e inéditas acciones de destrucción, funas y ahora filtraciones -todas las cuales parecen no tener límites y operan bajo la absoluta pasividad, impunidad e ineptitud del Estado- a las que se han visto sometidas la inmensa mayoría de los ciudadanos del país por parte de una (muy) "poderosa" minoría, cabe preguntarse, ¿ahora quién podrá defendernos?

Roberto Darrigrandi U.

Economista