En 2012, el Homo Ecce de Borja creado por Elías García Martínez a comienzos de siglo XX, fue alterado por Cecilia Giménez, una aficionada a la pintura que quiso 'arreglar' la obra.

Sin embargo, fue blanco de burlas a nivel internacional prestándose para memes e incluso un cambio de nombre: "Ecce Mono".

El arte de antaño nuevamente sufrió las consecuencias de las buenas intenciones. Esta vez, en la provincia española de Navarra.

Una escultura de San Jorge, tallada en el siglo XVI y ubicada en la iglesia de San Miguel de Estella, fue 'restaurada' por una profesora de manualidades del sector.

Al respecto, el alcalde de la comuna de Estella dijo: "Sí que parece que la restauración deja bastante que desear, al tratarse de una obra del siglo XVI, una escultura policromada con la que hay que tener mucho cuidado con los materiales que se utilizan, porque puede perder toda la capa original".

Ante esto, la Asociación de Conservadores y Restauradores de España (ACRE) lo calificó de "desastroso" e informó que presentará una queja ante la Fiscalía de Navarra.