Tras escuchar la noticia de la reciente apertura del mayor búnker antiatómico de la época comunista en Albania, en tan solo cuatro días más de 6.000 personas, entre albaneses y extranjeros, se han apresurado a visitar esta misteriosa fortaleza en Tirana, convertida ahora en un espacio histórico y artístico bajo el nombre de Bunk Art.

Inaugurado con motivo del 70° aniversario de la Liberación de Albania de la ocupación italiana y alemana, que se celebra cada 29 de noviembre, el refugio antinuclear se podrá visitar hasta finales de año.

Camuflado entre colinas simétricas del monte Dajti, en el este de Tirana, el refugio fue construido en secreto entre los años 1972 y 1978 para albergar a la elite política y militar en caso de un ataque nuclear extranjero que nunca se produjo. El túnel tiene una superficie de 2.685 m2 repartidos en cinco pisos con cinco salidas, que dan a un cuartel militar.