Había protagonizado comedias, películas familiares, románticas y también una gran producción de superhéroes que recaudó más de US$ 200 millones en todo el mundo, y en los últimos años había tenido papeles más oscuros, aunque habían estado relegados a roles secundarios. Pero ahora Blake Lively, la actriz de 25 años que se hizo conocida como Serena en Gossip girl y que a principios de mes se casó con Ryan Reynolds (ver recuadro), se pone al centro de una historia de violencia y narcotráfico, con el estreno de Salvajes, que se estrenó ayer en salas locales.
El largometraje es la última apuesta del director Oliver Stone y también actúan John Travolta, Salma Hayek y Benicio del Toro. El trío protagónico, eso sí, está compuesto por los más jóvenes del elenco. Lively interpreta a O, la novia compartida de dos mejores amigos que además son socios en un lucrativo negocio de cultivo y venta de marihuana, el que manejan de manera pacífica y sin mayores sobresaltos. Taylor Kitsch (John Carter) y Aaron Taylor Johnson (Kick ass) son sus dos parejas, y quienes tienen que rescatarla de un cartel mexicano -liderado por el personaje de Hayek- que la toma como rehén luego de que la dupla se niega a hacer negocios con ellos.
"Esta película fue algo muy atemorizante de hacer en tantos niveles distintos, porque es tan gráfica y tan violenta. Mi personaje tiene un arco que es muy desafiante tanto como actriz como personalmente, porque tengo una familia, tengo sobrinos, tengo una audiencia joven que me sigue… Eso también se viene a la mente", dijo Lively en una entrevista. La cinta está basada en una novela de 2010, escrita por Don Wislow, quien también se hizo cargo del guión para la versión cinematográfica.
"Un regreso al lado oscuro de Stone que genera una implacable energía y algo, pero no demasiado, humor", escribió el diario Chicago Sun-Times sobre la cinta que también fue aplaudida por la revista Entertainment Weekly: "Salvajes es Oliver Stone haciendo lo que debería haber hecho hace mucho tiempo: un astuto, amoral y feroz thriller de crimen, alejado de cualquier relevancia social o política".
Lively filmó esta cinta al mismo tiempo que registraba la sexta y última temporada de Gossip girl, que debutará en octubre en Estados Unidos, y aún no tiene fecha de estreno para Chile, donde es emitida por el canal Glitz. Durante dos meses la actriz estuvo viajando todas las semanas entre Los Angeles y Nueva York.
En el último ciclo de la serie sobre un grupo de chicos privilegiados de Nueva York, el personaje de Lively partirá peleada con su amiga Blair (Leighton Meester), con un nuevo interés romántico (Barry Watson, Samantha who?) y al parecer también una doble vida, ya que su nuevo novio la conoce como Sabrina y no Serena, lo que será aprovechado por su ex mejor amiga para hacerla sufrir.