Para el gestor del fondo de inversión más grande del mundo -con US$ 1 billón en activos bajo su administración-, Pimco, el paquete de rescate en Europa no disipa el nerviosismo en los mercados. No obstante, Alec Kersman, jefe para América Latina de la entidad, dice que los países emergentes serán en uno de los grandes ganadores tras la crisis y anticipa que Chile constituirá uno de los beneficiados en la región.
¿Podrían los inversionistas dejar los mercados de la periferia europea y venir a América Latina?
Sí. Sin duda las consecuencias de la crisis en Europa tendrá ganadores y perdedores. Los primeros serán los mercados emergentes. La alocación de capital se moverá desde los países periféricos de Europa hacia el centro de Europa, como Alemania o Francia, hacia EEUU y a emergentes que tienen fundamentos más fuertes. Chile será uno de los beneficiados de la región.
Cuando se piensa en inversionistas institucionales, fondos de pensión globales o compañías como Pimco, el asumir el riesgo de Grecia o Portugal se comparará con otros países, como Chile, Brasil, México o Colombia y en esa comparación ganan países como Chile.
¿Qué puede hacer Chile para atraer a estos inversionistas?
Lo que ha hecho bien es ser predecible en el tiempo, independiente de quién esté en el gobierno.
¿Cómo se ve en ese contexto la futura emisión chilena?
Habrá significativa demanda por deuda chilena. También le servirá al país para un benchmark de riesgo soberano sobre el cual las corporaciones podrán también emitir.
En el caso de la periferia de Europa, ¿seguirá la volatilidad?
El anuncio del salvataje disminuye el riesgo sistémico, pero hay dudas respecto de hasta qué punto se resuelven los problemas de solvencia.
Y los planes de austeridad de cada país, ¿no resuelven esa duda?
La pregunta es qué credibilidad tienen en el mediano y largo plazo esas medidas y su magnitud. España anunció un recorte 5% en los sueldos de los empleados públicos, es una medida creíble, pero el impacto es de sólo 1,5% en el PIB. Su plan es recortar a 6% en 2011 y 3% en 2013. Eso muestra compromiso y voluntad política. Son medidas difíciles y mientras más creíbles, más confianza tomará el mercado. Lo que pasa es que no alcanzan.
¿Qué dudas persisten?
Sobre su diseño e implementación, que debe ser a tiempo y masiva. Las manifestaciones de la población son importantes, pues los políticos quieren ser reelectos y tomar estas medidas es muy difícil. Además, cada país debe aprobarlas en su Parlamento.
¿Cuánto tiempo estará presente el nerviosismo en el mercado?
El mercado se mueve muchas veces de forma imprevisible. Los acontecimientos se dan muy rápido. El paquete anunciado es significativo, pero podría no pasar un mes y estar nuevamente con alto nerviosismo.
¿Qué puede gatillar el nerviosismo en los mercados?
Varias fuentes. A veces pasa que el desencadenante es algo impensado. Podría ser el mecanismo de transmisión de la crisis a través del sistema bancario o podrían ser los temas legales en Alemania, donde ha habido presentaciones legales y si avanzan habrá nerviosismo. También por las monedas, el euro devaluándose muchísimo en las últimas semanas.