"Vengo a la misa, fui su alumno". Con esas palabras, el presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade (PS), explicó ayer su presencia en la misa de conmemoración de los 25 años del asesinato del ex senador de la UDI Jaime Guzmán, que se realizó ayer en Providencia.
El parlamentario tuvo una particular relación con el fundador del gremialismo desde sus tiempos universitarios, cuando -ya militando en el PS- fue su alumno en la cátedra de Derecho Constitucional en la Universidad Católica.
Tras el golpe de Estado, Andrade fue detenido y Guzmán hizo gestiones para que las autoridades revisaran su caso.
Una vez en libertad, Andrade regresó a la universidad, pero fue expulsado por haber estado preso. Fue entonces que Guzmán intervino para que su alumno fuera reincorporado y pudiera terminar su carrera.
Andrade también estuvo presente para el funeral del senador en 1991 -desafiando las recomendaciones del PS- y en la inauguración del memorial a Guzmán, en 2008. "Tengo, como ustedes saben, un agradecimiento personal respecto de un gesto que él tuvo conmigo (...) tengo más de una razón para estar acá", dijo Andrade a la salida de la misa.