Andrés Navarro Haeussler renunció al cargo de director y presidente de Sonda y sus filiales, por "razones de índole exclusivamente personal". Este ingeniero civil industrial fundó su emblemática empresa en 1974 en sociedad con Copec y con US$ 750.000 de capital, la que ayer cerró en Bolsa con un valor de US$ 2.317,9 millones, tras bajar 3,17% y encabezar las pérdidas.

Anoche, la empresa informó que "el directorio respeta la determinación de don Andrés Navarro, esperando que en el futuro se den las condiciones para su reincorporación al directorio". La presidencia la asumió Mario Pavón (a la fecha vicepresidente del directorio) y la vicepresidencia Pablo Navarro Haeussler, "quienes conocen a cabalidad la compañía después de ejercer importantes cargos ejecutivos y desempeñarse como miembros del directorio por varios períodos", dice el comunicado.

En su carta de renuncia, Navarro hizo presente que "la grandeza de Sonda se funda en lo que enseña, motiva y exige a sus trabajadores, no en lo que les proporciona. La grandeza de sus trabajadores no se funda en lo que reciben de la empresa, sino en lo que entregan. Y ese es nuestro valor fundamental".

En entrevista a La Tercera en agosto de 2011, el empresario manifestó que se retiraría a los 65 años, que cumple el 30 de noviembre. Dijo que la segunda generación no se haría cargo del holding y enfatizó que Sonda nunca funcionó con lógica de empresa familiar. En 39 años Navarro construyó una multinacional de las TI con presencia en 10 países de la región.