El ministro de Planificación, Felipe Kast, anunció ayer tres líneas de acción diseñadas por el gobierno para el trabajo y entrega de tierras a mapuches, y que incluye medidas para poner fin a lo que calificó como un "mercado negro", en que comuneros favorecidos con predios los arriendan a los mismos particulares a quienes les fueron compradas las hectáreas.

La primera de ellas apunta a realizará un apoyo integral, que incluirá a todos los servicios vinculados al mundo de los pueblos originarios.

El segundo eje es fomentar la entrega de tierras mediante el mecanismo de la Letra A del Artículo 20 de la Ley Indígena, que beneficia a personas o comunidades con requisitos como historia de la comunidad, número de personas, situación socioeconómica, entre otras.

La tercera línea, y donde se intenta terminar con el arriendo de tierras, es que los subsidios incluirán un convenio de apoyo productivo, para que los indígenas trabajen las tierras.

En lo inmediato, se trabajará en detectar cuántas tierras están sin aprovechamiento productivo y, de las que estén siendo trabajadas, cuáles están arrendadas a particulares.

Kast explicó que se generó una sobrevalorización de las hectáreas, señalando que hay casos en que los incrementos superaron el 800%, lo que, a su juicio, ha llevado a un verdadero "mercado negro de tierras".