Cuando en enero pasado regresó de manera sorpresiva a Haití, por primera vez desde la caída de su régimen en 1986, Jean-Claude Duvalier dijo que volvía para "reconciliar" a los haitianos y para "ayudar" tras el devastador terremoto de 2010. Pero hasta ahora "Baby Doc" no ha hecho ni lo uno ni lo otro. No sólo el proceso judicial en su contra es un completo caos, sino que vive rodeado de una serie de privilegios, según señala la agencia Associated Press.
Más que "las campanas de la reconciliación" que prometió tras su retorno desde su exilio en Francia, el ex dictador continúa dividiendo a su país. Ayer, varias decenas de manifestantes y algunos de sus abogados irrumpieron durante una conferencia de prensa de Amnistía Internacional, justo cuando el organismo de DD.HH. esperaba dar a conocer un informe sobre las acusaciones que pesan sobre "Baby Doc". Así, sus partidarios impidieron que Amnistia Internacional presentara su investigación en una conferencia.
Tras la muerte de Francois Duvalier ("Papa Doc") en 1971, "Baby Doc" asumió el poder con apenas 19 años. Tal como su progenitor, durante su régimen aplicó mano dura y una fuerte represiíon hasta 1986. Aquello le ha valido sendas acusaciones de crímenes de lesa humanidad y una serie de cargos por corrupción, enriquecimiento ilícito y malversación de fondos.
Si bien Duvalier ha comparecido en tres ocasiones ante un juez, el caótico y lento sistema judicial haitiano no garantiza un debido proceso. De hecho, el juez a cargo del caso aún no decide si debe ser juzgado en una corte penal.
Lejos de prisión
Según AP, Duvalier se pasea por Puerto Príncipe y suele ser visto asistiendo a conciertos de jazz y lujosas cenas. Ello, en medio de un escenario casi "apocalíptico" a causa del terremoto que devastó a la capital haitiana, que está muy lejos de recuperarse, al igual que el resto del país, el más pobre de América Latina y el Caribe.
Si bien se esperaba que luego de su retorno a Haití Duvalier fuera encarcelado, "Baby Doc" está lejos de pisar la prisión. De acuerdo con Associated Press, actualmente se le permite movilizarse por Petionville, una zona al sudeste de Puerto Príncipe. "Se le ha visto saliendo a cenar con amigos en un hotel y en un bistró francés. Celebró su 60 cumpleaños en julio, en el jardín trasero de una casa privada", contó Trenton Daniel corresponsal de la agencia estadounidense en Puerto Príncipe. Sin embargo, su salud parece estar deteriorándose. En marzo fue hospitalizado por seis días con dolores de pecho y el juez del caso declaró que se veía débil en el tribunal. "Baby Doc" vive en una residencia en una colina con vista a la ciudad, en un enclave de la pequeña, pero poderosa elite haitiana, de acuerdo con Reuters. Si bien no pocos haitianos quieren que Duvalier sea enviado a la cárcel, hay otros que aún recuerdan cuando el ex gobernante lanzaba billetes en las calles.
Durante el retorno, algunos analistas dijeron que Duvalier volvió a su país porque se encontraba en bancarrota. Además, estaría intentando reanimar su partido político con la esperanza de que algún día regrese al poder, algo que en un país sin partidos políticos fuertes, nadie se atreve a descartar.