Fue un autógrafo. Una simple dedicatoria garabateada sobre uno de los primeros LP de Menudo selló para siempre la relación entre el periodista mexicano Antonio "Toño" Carrizosa y Ricky Martin. "Para mi pana", fue el mensaje que el puertorriqueño escribió sobre un disco tras el cierre de un multitudinario show en Guadalajara en 1984, cuando apenas tenía 13 años.

Además, se trataba de un gesto de genuina calidez boricua por la confianza que el reportero le había entregado en hoteles y camarines durante los días de gloria del conjunto. "Era un niño travieso y adorable, pero muy tímido. Podía estar tomándose fotos todo un día, pero era temeroso de lo que sucedía alrededor", recuerda el mexicano, uno de los periodistas musicales más conocidos de ese país y autor de Ricky Martin: la historia verdadera (1997), el primer libro que retrató el ascenso del intérprete a la fama planetaria (en Amazon a US $8,93).

Ahora, al teléfono desde el DF, Carrizosa dice que su estima hacia Martin no ha variado. Pero sí arroja una de las primeras opiniones críticas hacia la carta con que el lunes pasado el artista confesó su homosexualidad. "Fue un error que lo reconociera", postula el periodista. "Lo que él hizo no fue poner un punto final, sino que ahora abrió la opción de que surjan 100 mil preguntas que va a tener que contestar. Permitió que todo el mundo conozca su vida privada y su carrera dio un giro donde ya no volverá a ser la misma".

Además, Carrizosa cree que la prensa y parte de los fans sólo harán foco en la parte íntima de los proyectos venideros del hombre de Vuelve, sobre todo en un continente como Latinoamérica, poco habituado a estas confesiones públicas. "En Europa o EE.UU puede ser más normal, pero aquí no. Aquí todo el mundo o hace chistes o entra en el morbo de saber más. Ahora cada vez que saque un disco o una canción todos buscarán pistas de su sexualidad", detalla.

Eso sí, el reportero, autor de libros de rock mexicano y de música grupera, cree que la revelación de Martin tuvo un acierto indirecto: fue un golpe publicitario para una carrera que hoy no pasa por sus mejores capítulos (no lanza un álbum inédito desde 2005). "Hoy, hasta el último rincón del universo sabe que Martin es homosexual y esa suerte de polémica hará que muchos que no sabían de él quieran conocer sus discos", asegura. "Tras Livin' la vida loca, él nunca más volvió a tener un hit universal. Llegó hasta un techo, siguió siendo un gigante en Latinoamérica, pero no se mantuvo a nivel global. Sus discos fueron mal promocionados, porque no te pueden dar un millón de dólares para un álbum y 10 pesos para su promoción, y eso le hicieron. Le ha faltado continuidad", determina el mexicano.