Xabier Azkargorta lucía tranquilo. Faltaban apenas tres minutos para que terminara el duelo entre su equipo, Bolívar, y Lanús de Argentina. Los locales dominaban el juego y los transandinos parecían entregados. El empate obtenido en la ida era un buen aliciente, pero la victoria que hasta ese momento estaba obteniendo su escuadra ratificaba el buen momento de los bolivianos que, por segunda vez en su historia, accedieron a la ronda de cuatro mejores del torneo continental, aunque primera vez con el actual formato de competencia.
Tras el pitazo final, el ex entrenador de la selección chilena se abrazó con su ayudante técnico y se dejó contagiar por la alegría de los fanáticos presentes en el Hernando Siles de La Paz, donde hasta Evo Morales celebró con el triunfo. Fue el único momento de manifestación de felicidad, pues para el Bigotón no hay tiempo que perder.
"Jugamos con coraje, con mucha inteligencia. Tenemos una ilusión tremenda y hay que seguir trabajando. Tenemos que disfrutar este momento, pero no perder de vista lo que se nos viene en el futuro y empezar a trabajar desde ya en aquello. De aquí en adelante puede pasar cualquier cosa", aseguró el hispano, mientras miles de fanáticos iniciaban los festejos en todo Bolivia.
En la próxima ronda, los bolivianos se medirán con San Lorenzo, en una fase que se disputará después de la Copa del Mundo, la última semana de julio.
Defensor avanza
Anoche, en Montevideo, Defensor Sporting recibía a Atlético Nacional de Colombia con la misión de ratificar la ventaja obtenida en la ida (2-0). En un partido de mucho roce, los locales terminaron imponiéndose 1-0 con gol de Andrés Olivera (90'). Los charrúas se medirán ante Nacional de Paraguay en la otra semifinal.
Desde la temporada 1992 que las semifinales de la Copa no eran disputada por equipos que nunca ganaron el torneo.