Después de que la semana pasada la Reserva Federal de Estados Unidos decidió elevar las tasas de interés por primera vez en casi 10 años, en 25 puntos base, hasta un rango de entre 0,25% y 0,5%, el foco del mercado ha girado hacia la velocidad con que se realizará el proceso de ajuste. Dicho ritmo podría estar condicionado por la postura de los 10 miembros que conformarán el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, su sigla en inglés) el próximo año.
La rama de la Fed responsable de fijar los tipos está compuesta por dos grupos. Por un lado, están los miembros permanentes, que incluyen a los siete integrantes de la Junta de Gobernadores y al presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York. Actualmente, sólo seis personas integran este grupo, ya que existen dos puestos de gobernadores vacantes. El presidente Barack Obama nominó este año a Allan Landon y a Kathryn Dominguez para dichos cargos, pero el Senado aún no los confirma.
Por otra parte, están los 11 presidentes regionales restantes, que a comienzos de cada año rotan para que cuatro de ellos tengan derecho a voto en el Comité por un plazo de un año.
Es esta rotación la que podría generar un cambio de sesgo dentro del FOMC, ya que de los cuatro nuevos funcionarios que servirán en 2016, tres son reconocidos por defender el ajuste de la política monetaria para evitar presiones inflacionarias y/o burbujas de activos.
Dennis Lockhart (Atlanta), Charles Evans (Chicago), Jeffrey Lacker (Richmond) y John Williams (San Francisco) serán reemplazados por Eric Rosengren (Boston), Loretta Mester (Cleveland), Esther George (Kansas City) y James Bullard (St. Louis).
Mientras Rosengren está a favor de mantener las tasas de interés en niveles bajos para estimular el crecimiento -postura conocida como dove-, Mester y Bullard se inclinan ligeramente por elevar los costos de financiamiento, lo que en inglés se denomina hawkish.
Por su parte, George ha expresado, desde al menos inicios de 2013, su preocupación por las potenciales burbujas que podrían estar generando los tipos en niveles mínimos, por lo que respalda fuertemente el aumento de las tasas, es decir, tiene un sesgo hawk.
Mayor división
Richard Grossman, profesor de economía de la Universidad Wesleyan y experto en la política de la Fed, aseguró en una columna que estos cambios "sugieren un FOMC ligeramente más hawkish en 2016", lo que significa "una mayor atención por parte de la Fed a los peligros de una mayor inflación y que, en igualdad de condiciones, los incrementos en la tasa de interés se volverán más probables después del 1 de enero".
Los analistas de Danske Bank afirmaron en un informe que el Comité estará más dividido entre los que abogan por mantener una política flexible y los que favorecen la normalización de los tipos, "ya que habrá tres hawks con derecho a voto el próximo año comparado con uno este año".
Sin embargo, los expertos creen que el "centro" del FOMC se mantendrá igual. "La mayoría de los miembros de la Junta (que no cambian) tienen una visión entre dovish y neutral".
A pesar de que habrá más presidentes regionales hawkish, ellos siguen siendo superados por los miembros permanentes con un sesgo hacia un ajuste gradual de la política, acotaron.
Esta visión es compartida por el equipo de Deutsche Bank Research, que en un reciente reporte a clientes aseveró que, si bien el viraje hacia una dirección más hawkish podría afectar a la política en el margen, este giro no tendría "ninguna implicancia de política significativa".
Dada esta división entre los integrantes de la Junta y los presidentes regionales, "no debería ser sorpresivo para nadie si algunas de las decisiones en 2016 no son unánimes", manifestó a La Tercera Andrew Levin, ex asesor, entre 2010 y 2012, del entonces presidente de la Fed Ben Bernanke y de la vicepresidenta Janet Yellen.
El profesor de Dartmouth College puntualizó que más allá de las diferencias que podría haber a partir de enero, Yellen es la actual líder del Comité y ella trabaja muy de cerca con Stanley Fischer, el vicepresidente, y William Dudley, presidente de la Fed de Nueva York.
"Usualmente son llamados 'la troika' y ellos establecen la dirección del Comité", sentenció.