El reconocimiento provino del propio ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Felipe Morandé. "Vamos a ser el último país de Sudamérica en comenzar a implementar la televisión digital en serio, como industria", dijo Morandé a Radio Duna. "El último", remarcó a continuación.

Con estas palabras, la autoridad admite el evidente retraso de la TV digital en Chile, a casi un año de la definición de la norma técnica que regirá las transmisiones.

En el gobierno explican que Brasil lidera la transición hacia el modelo digital en la región y que a diciembre pasado tenía una cobertura de 60 millones de personas. De hecho, las telefónicas de ese país ya tienen planes para TV digital a los celulares. Perú está en segundo lugar, mientras que Argentina está desplegando el servicio en varias ciudades y en tres años aspira a tener cobertura nacional.

Asimismo, Uruguay y Paraguay ya adoptaron la norma. Mientras, en Chile recién se realizan transmisiones experimentales.

El diagnóstico lo comparte el secretario general de Mega, Alfredo Escobar, quien afirma que "todos nuestros vecinos ya están con las frecuencias otorgadas y en la época de la transición, con transmisión simultánea y nosotros aquí con transmisiones experimentales, con transmisores muy débiles".

En el gobierno explican que la gran diferencia entre Chile y los países vecinos está asociada al marco regulatorio. A modo de ejemplo, explican que en Argentina y en Perú empezaron la migración de analógico a digital basándose en la ley que ya existía, y que en Brasil el modelo se implementó a través de un decreto, porque no requerían una nueva normativa.

"Sin embargo, en Chile estamos capturados porque requerimos una ley, que no sabemos cuándo puede salir", asegura una fuente.

El proyecto de ley que introduce la TV digital entró al Congreso en octubre de 2008, cuando era ministro de Transportes y Telecomunicaciones René Cortázar.

Pese a que lleva casi dos años de tramitación, en el gobierno confían en que su discusión podría acelerar en los próximos meses. A esto podría contribuir la pronta definición sobre Chilevisión, que de alguna forma, admiten en el Ejecutivo, ha retrasado la agenda de La Moneda en este sector.

El gobierno decidió recientemente no poner urgencia ni introducir modificaciones a la iniciativa mientras no se logre un consenso político transversal en torno a los temas más relevantes.

Sí está decidido que se presentará una indicación para acortar el plazo de la migración desde la televisión analógica a la digital. Esto reducirá de cinco a tres años el plazo para que 85% de la población haya migrado a la TV digital y de ocho a cinco años la transición total.

Al mismo tiempo, la autorida ampliará la duración de los permisos experimentales de TV digital,que vencen en octubre, para no suspender las transmisiones existentes a la espera de la ley.

Hasta ahora, la normativa propuesta establece una actualización del régimen concesional,entre otros.