La vio y se enamoró. Olvidó el matrimonio tormentoso con Carolina Messen. El romance con paparazzi con la cubana Mey Santamaría. Las crónicas faranduleras que lo vinculaban con la uruguaya Claudia Schmitd y con la vedette argentina Luciana Salazar. Porque cuando Marcelo Salas conoció a Andrea Fleiderman, durante el casamiento de una hermana del futbolista Sebastián Rozenthal en 2006, supo que la rubia era la indicada. Y ahora que esta semana se despidió del fútbol y comienza una nueva vida dedicado a los negocios y a la familia, ella es la mujer que lo acompaña. La que cambió su idea sobre el amor.
"El Matador" estaba desilusionado. Poco creía en las relaciones estables. Su matrimonio con Carolina Messen -la ex finalista de Miss 17 que en 1996 se casó con Salas, con quien tuvo dos hijas- terminó en 2003. Y el fin no fue bueno. El intentó reconciliarse "por el bien de sus niñas", detallan las mismas fuentes. Construyó una casa en Santa María de Manquehue para Messen y sus hijas. Pero nunca resultó. En medio se embarcó en affaires fugaces y de prensa rosa. Como el con Mey Santamaría, en 2004, que tuvo escándalo porque ella renunció al programa de Kike Morandé debido a que se sentía acosada por la presión de los medios. "Marcelo se asustó un poco con esa aventura, porque iba todo muy rápido. Mey quería casarse y tener hijos", comenta uno de los confidentes de Salas.
Un año después partió una relación con la modelo "Titi" Aguayo, que también provocó frenesí entre "opinólogos" y matinales de farándula pero, entre ires y venires, terminó sin un compromiso más profundo. Salas contaba tras su separación que nunca volvió a pedir pololeo a una mujer. Y Fleiderman le devolvió la confianza en los compromisos sentimentales.
¿Quién es ella?
Andrea Miriam Fleiderman Nussbaum tiene 33 años. Estudió en el Colegio Hebreo y al conocer al "Matador" vivía en un departamento en Lo Barnechea desde el cual siempre respondió que prefería no referirse a su romance con el futbolista -ayer ella no contestó los mensajes de La Tercera-. Su familia es dueña de una empresa dedicada a la distribución de productos para guaguas y niños con sucursales en Vitacura y Las Condes y la amistad con el ex deportista continuó en los salones del pub Las Urracas.
"Lo primero que le gustó a Marcelo, aparte del look de Andrea, fue que ella tenía una situación establecida, que no estaba interesada en su fama y que tuvo que tomarse su tiempo para poder conquistarla, porque no lo aceptó de buenas a primeras", cuenta uno de los amigos del ex goleador. Pero como para él siempre lo más importante han sido sus hijas, lo que finalmente lo enamoró fue que su nueva amiga también era separada y con dos hijas. Por eso lo entendía y lo aconsejaba.
Fleiderman le fue demostrando "que era aterrizada y muy inteligente, con una idea de la vida y la familia distinta a la que tenían sus últimas conquistas... Y eso a Marcelo le dio tranquilidad", comentan las mismas fuentes. Asegurando que con su actual novia el ex seleccionado logró hacer un corte definitivo con Messen. Incluso hace un año la demandó para bajarle la pensión alimenticia que entonces era de $ 2 millones 700 mil.
Aunque al principio del pololeo viajaron a Isla de Pascua y Miami, y se mostraron en el torneo ATP de Viña y en el Festival, ninguno de los dos ha dicho una palabra sobre la relación. Sus amigos cuentan que por ahora no hay planes de matrimonio. Dicen que el "Matador" está centrado en sus iniciativas comerciales. Y que "con Andrea está cada vez más seguro y feliz".