Deambulaba descalzo, sólo arropado con un pijama. No paraba de llorar y preguntar por su madre. Así fue encontrado a las 6.30 de ayer el menor de dos años, identificado con las iniciales A.M.P., por un chofer del Transantiago en un paradero ubicado en la esquina de Vicuña Mackenna con Departamental, en San Joaquín. A esa hora los termómetros no superaban los seis grados y el frío calaba por la humedad. "Me detuve en el paradero y de inmediato se acercó. Estaba tiritando de frío y llorando por su mamá, así que me saqué la parka, lo abrigué y él se me acurrucó en el cuello", cuenta el conductor de la línea 210 Fredy Prado, quien llamó a Carabineros. Los efectivos policiales llevaron al niño a constatar lesiones al Hospital Exequiel González Cortés. En el recinto se descartó que el menor sufriera principio de hipotermia o fuera víctima de maltratos y agresiones.
Luego fue trasladado a la 50 Comisaría de San Joaquín, donde fue atendido por el personal policial. La aspirante a oficial de Carabineros Daniela Valdivia fue la encargada de bañarlo, vestirlo y alimentarlo: "Me conmoví mucho, tengo sobrinos de esa edad", señaló. El mayor Jorge González contó que el pequeño "llegó asustado, pero luego se generó un buen vínculo con él. Se le puso ropa de un hijo de personal nuestro".
Más tarde, por instrucción del juez de familia de San Miguel fue trasladado a la 35 Comisaría de Menores.
Con las pocas palabras que maneja, el niño contó que salió de su casa para buscar a su mamá, porque había ido a trabajar.
Siete horas más tarde, a eso de las 13.30, la madre del menor, B.P.S. (17), llegó a buscarlo a la comisaría junto con su familia. "Cuando vi que el niño no estaba lo salí a buscar por todos lados. Yo pienso que despertó y salió. La puerta la sabe abrir solo", dijo la mujer a TVN. Por orden del magistrado sólo podrá optar a recuperar su tuición tras una audiencia que se realizará esta mañana. De todas formas, fue entregado provisoriamente a una tía.
El director del Sename, Francisco Estrada, anunció que interpondrá medidas de protección en favor del niño y que solicitará investigar la capacidad de la mamá para cuidar al menor.
Según relató la tía de la madre, O.P., su sobrina tiene siete meses de embarazo, cursa la enseñanza media y trabaja como promotora: "Ella me dice que no supo cómo se le arrancó, fue un descuido. Es una niña, pero es muy buena mamá, muy responsable". Según explicó, tras conversar con la madre del niño, ella estaba durmien do cuando el niño salió a la calle. Al despertar, comenzó a buscarlo y no lo encontró. La versión contrasta con lo expuesto por el menor, que aseguró que salió a buscar a su madre, que había ido a trabajar.
El abuelo del niño, M.P., dijo que se trató de un descuido. Además, explicó que hasta hace dos semanas vivía con su hija y su nieto, pero que ella se cambió a vivir con su madre, quien estaba de viaje.