Hace más de dos años no se ven, pero hablan por teléfono todos los días: Gabriel García Márquez desde México y su hermano Jaime desde Cartagena de Indias. El jueves, el menor de los García Márquez confirmó las versiones sobre la salud del Nobel colombiano en una charla con jóvenes en el Museo de la Inquisición. "Lo que él tiene son algunos conflictos de la memoria. En la familia todos sufrimos demencia senil, yo también comienzo a tener algunos problemitas y, por lo tanto, él ya tiene los estragos", dijo. "Todavía lo tenemos, podemos hablar con él con mucha alegría y con mucho entusiasmo como siempre ha sido", agregó. Según él, el problema de su hermano se adelantó por el cáncer linfático que tuvo en 1999: "La quimioterapia que usaron le salvó la vida, pero también le acabó muchas neuronas, defensas y células".
Ayer, sus palabras fueron difundidas por la prensa mexicana, que se ha hecho eco del retiro del Nobel desde marzo pasado, cuando celebró 85 años en silencio. Hace poco, el periodista Plinio Apuleyo Mendoza también habló de los problemas de memoria del escritor. En su charla del jueves, Jaime se refirió a dos textos que permanecerían inéditos: La tigra y En agosto nos vemos. Sin embargo, descartó nuevas publicaciones: "Desgraciadamente, no vamos a tener esa oportunidad", dijo.