Un nuevo actor prepara su ingreso al sector eléctrico, de la mano de un grupo de ejecutivos con amplia experiencia en esta área.
El grupo constructor Belfi en conjunto con el Fondo de Inversiones Los Andes ingresaron -a través de la sociedad Mediterráneo SA- la semana pasada para su evaluación el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto "central de pasada Mediterráneo".
Este contempla la construcción de una central hidroeléctrica de pasada con una capacidad de generación de 210 megawatts en el sector denominado La Junta, donde confluyen los ríos Torrentoso y Manso, en la provincia de Llanquihue, Región de Los Lagos.
La central demandará una inversión de US$ 400 millones. Para una central de este tipo, el proceso de evaluación ambiental tomaría unos 18 meses, mientras que su construcción se estima en otros 42 meses. Con esto, la central podría estar en operaciones a fines de 2016 o principios de 2017.
"El proyecto también contempla la construcción de una línea de transmisión de energía eléctrica, denominada Línea Alto Reloncaví, de doble circuito y tensión nominal 220 KV, que se desarrollará desde la subestación Alto Reloncaví que se ubicará a un costado de la central, tendrá una extensión aproximada de 63 km y contará con una franja de servidumbre y seguridad, cuyo trazado se extenderá hasta conectarse al Sistema Interconectado Central (SIC) en el sector donde está emplazada la actual central Canutillar", señala el EIA.
Mediterráneo SA es propiedad del fondo de inversiones Los Andes -ligado a los empresarios Roberto Hagemann, Ignacio Muñoz y Carl Weber-, la Constructora Belfi y otras sociedades donde participan empresarios como Ricardo Bachelet, Eric Bongardt, José Cox e Ignacio Guerrero.
Los derechos de agua que utilizará la central fueron adquiridos en remate a la Dirección General de Aguas en unos US$ 44 millones. Fuentes señalan que, por el momento, este es el único proyecto hidroeléctrico que desarrollarán en la zona.