El uso de medidas micro y macroprudenciales, las que deberán ser complementadas con alzas en la tasa de política monetaria, son las opciones que el investigador senior del Centro de Estudios Públicos (CEP), Vittorio Corbo, planteó, en una reciente exposición en el organismo, para desacelerar el crecimiento de la demanda interna y evitar así que se exacerben los desequilibrios en la economía.

El ex presidente del Banco Central manifestó que Chile completó en 2012 "otro muy buen año, favorecido por el buen manejo macro, los buenos términos de intercambio y las favorables condiciones financieras externas e internas". Destacó que "en el agregado, el PIB creció 5,6% en 2012 y 6,1% anualizado en el cuarto trimestre, registrando una nueva aceleración en el margen". Además, dijo, la economía siguió tomando dinamismo a inicios del 2013, puesto que el Imacec de enero creció 6,5% anual y 8,5% anualizado en el trimestre noviembre-enero.

Sobre el comportamiento de la demanda interna, Corbo dijo que "vuelve a acelerarse y crece más que el PIB, apoyada por buenos términos de intercambio, alto crecimiento de la masa salarial real, buenas condiciones crediticias y expectativas favorables. Destacó el dinamismo del consumo privado, que creció 7,3% anual en el cuarto trimestre, después de crecer 6,0% en el tercero.

Sobre la trayectoria de la inflación, que consideró como "un verdadero puzzle", destacó que bajó de 4,4% anual en febrero a 1,5% en diciembre, agregando que "la brecha creciente entre la expansión de la demanda interna y la expansión del PIB no se ha manifestado aún en una mayor inflación, pero sí en un creciente déficit en cuenta corriente" y que la ampliación de este déficit y un alza del PIB por sobre el potencial "aumenta riesgo de sobrecalentamiento".

De allí que Corbo planteó que la pregunta clave es cómo desacelerar el crecimiento de la demanda interna, para evitar que se exacerben los desequilibrios. Consideró que haber adelantado la meta de alcanzar un déficit estructural del 1% al final de este gobierno va en la dirección correcta.

No obstante, "dado el alto dinamismo del gasto privado, esto no es suficiente y la política monetaria seguirá presionada". Afirmó que "dada la brecha creciente entre demanda interna y PIB, la amplia brecha de tasas de interés y la abundante liquidez internacional, lo más probable es el uso de medidas micro y macroprudenciales. De no resultar suficiente, esto sería seguido en el transcurso del año con alzas en la tasa de política monetaria".

Dijo que en el corto plazo, los principales riesgos para la economía chilena están en el entorno externo, a raíz de un eventual deterioro de la crisis europea y problemas en las negociaciones fiscales en EE.UU.; en una demanda doméstica que no se desacelere lo suficiente para acotar el alza en el déficit en la cuenta corriente y evitar un alza de la inflación; y en los riesgos siempre presentes de una crisis geopolítica que afecte el precio del petróleo y problemas en China.