De la placenta de un recién nacido se pueden extraer hasta cinco veces más la cantidad de células madre de las que se sacan de un cordón umbilical. Así lo descubrió un estudio realizado por el Children's Hospital & Research Center Oakland, en California, el primero en revelar este nuevo camino médico.
Se trata de células con la misma capacidad que las "madre" del cordón umbilical: convertirse en cualquier tipo de célula de la sangre y que sirven para curar trastornos crónicos relacionadas con la sangre, como anemia, talasemia y leucemia. Las células madre pueden transformarse en cualquier tipo de tejido, desde muscular a cerebral pero, en este caso, tienen más potencialidad al ser sanguíneas.
Como explica el doctor Frans Kuypers, director de la investigación, a La Tercera, "somos los primeros en determinar cuántos de este tipo de células madre se encuentran en la placenta humana, llegar a ellas y obtener una suficiente cantidad".
El equipo ya ha testeado estas células en tratamientos de enfermedades en animales y está trabajando para pronto hacerlo en humanos.
El tema está en que de la placenta se puede obtener hasta cinco veces más cantidad que del cordón umbilical. Rommy Von Bernhardi, docente de la Universidad Católica, explica que esto ocurre porque en la placenta hay una red mucho más amplia de vasos sanguíneos, eso las alimenta y hace que existan más células.
Al equipo de Kuypers le interesa generar bancos públicos a partir de esta gran cantidad de células que pueden ser extraídas de placentas de niños sanos. Esto ampliaría la posibilidad de tratamientos y trasplantes de médula, ya que aumentan las probabilidades de compatibilidad al haber más muestras de células madre.