Como dos personas distintas se mostró Erasmo Moena Pinto (40) en las primeras 48 horas desde su captura. Una, muy segura e interesada en mostrarse culta y activa, adecuada para los cursos de diseño y técnico analista que en la PDI afirman ha realizado en la cárcel; la otra, silenciosa e introvertida.
En ambas facetas se muestra como una persona fría, dicen quienes han compartido estas horas con él. Y en ningún momento, agregan, ha dicho alguna frase o mostrado alguna actitud que para sus captores pueda interpretarse como que está arrepentido: tras salir de la cárcel el 14 de marzo pasado, luego de cumplir una condena por una violación en 2007, violó y asesinó a dos mujeres en la V Región.
Moena fue interrogado ayer por cuatro horas y cuarto por el fiscal Stefan Kramar, quien hoy formalizará cargos en su contra por el secuestro y violación con homicidio de dos mujeres, que viajaron a Viña del Mar para obtener un supuesto cargo en una empresa maderera. "No mostró mayor sentimiento", aseguró el fiscal tras la diligencia.
"Carece de empatía con respecto al dolor de sus víctimas (...). Es un delincuente organizado, que planifica", agrega la jefa del Centro de Asistencia de Víctimas de Atentados Sexuales (Cavas), Carolina Cáceres. Ella elaboró un perfil de su modus operandi, en que menciona rasgos de "sicopatía" y un "trastorno de personalida perversa".
El subprefecto Luis Vallejos, jefe de la Bicrim de la Viña del Mar, planteó ayer que en la cárcel Moena asegura ser una persona "que manda" y que allí realizó cursos de "técnico analista y diseño gráfico".
Según explicó ayer el fiscal, Moena reconoció que el martes 6 de abril perpetró los homicidios de Loreto López Fernández (39) y Andrea Quappe Pinto (43), pero no así sus violaciones. Según el fiscal, Moena relató que, tras reunirse con la primera víctima, tomaron un bus a Santiago, que él pagó, y que se bajaron en un lugar junto a la Ruta 68 en el sector de Placilla, donde cometió los asesinatos.
Dice que mató a Loreto entre las 12.00 y las 13.00, que repartió sus pertenencias en basureros. Luego, fue a su casa en Viña, se cambió de ropa y partió a juntarse con Andrea Quappe, a quien asesinó entre las 19.00 y las 20.00. El Servicio Médico Legal (SML) concluyó que ambas muertes fueron por asfixia, producto del ahorcamiento. Debido a la rapidez de sus movimientos, el fiscal indagará la participación de eventuales cómplices.
No es todo: Moena respondió a una llamada de los padres de Loreto López hacia la hora del crimen. "Un hombre levanta el teléfono y dice: 'No, Loreto está arriba, en el segundo piso, está viendo unos papeles'", contó ayer Félix López, padre de la víctima. Fue el último llamado que contestó.
Moena declaró al fiscal que tras su salida de la cárcel, el 14 de marzo, viajó directamente a Viña del Mar, por lo que asegura no saber de los otros tres casos de violación por los que será formalizado también en la VIII Región, pese a que existe un reconocimiento fotográfico de esas víctimas.
Estos casos generaron ayer una crítica a los Juzgados de Garantía por parte de la fiscal regional de la VIII Región, Ximena Hassi. Esto, ya que sólo se aceptó la orden de captura de Moena el 1 de abril, tras presentar una reposición. Hassi dijo que estudian presentar una queja.