Mientras en la superficie, el sector comercial de la Avenida Andrés Bello, en las comunas de Las Condes y Providencia, vuelve de apoco a la normalidad luego del desborde del río Mapocho, ocurrido la mañana del domingo, bajo suelo el panorama sigue sin mejorar. Al menos en gran parte de los edificios afectados por el torrente de agua y barro.
En un recorrido realizado por al menos siete edificios se constató que los estacionamientos siguen anegados por metros de agua, algunos incluso cinco pisos bajo tierra. Carlos Ramos administra dos de dos inmuebles, Geocostanera en Andrés Bello e Infinity Tower, ubicados en calle Suecia. Ambos poseen tres y dos niveles de subterráneo respectivamente, los que están llenos de agua. "Desde el lunes estamos sacando agua, yo espero esta noche (ayer) terminar y de ahí seguimos con el barro. Todo lo hemos hecho nosotros, contratamos a la empresa de construcción, que nos hizo buenos precios, pero falta mucho todavía", relata Ramos.
El mismo escenario vive Mauricio Videla, administrador del edificio Costanera Puente Suecia, que tiene tres niveles en la misma situación. Videla asegura que "mientras no saque el agua y barro no es posible que las oficinas funcionen".
Otro de los inmuebles más golpeados fueron Lyon I y Lyon II, que tienen cuatro y cinco pisos de estacionamientos subterráneo, los que siguen anegados. Ayer el municipio de Providencia prestó ayuda al Aparte Hotel Tempo Rent, que tenía tres niveles bajo tierra de los cuales uno ya se logró secar, pero faltan los otros con 15 vehículos atrapados.
Según el cálculo de la municipalidad en los tres primeros días después de la emergencia se han gastado más de $ 44 millones, sólo por concepto de limpieza. "La mayor parte ha salido del ítem gasto interno, transferencias al sector privado de emergencia, y eso es lo que, en principio, hemos acordado con Costanera Norte, para que nos restituya. Las compras en maquinarias e implementos, que quedarán para el municipio, corresponden al ítem bienes y servicios de consumo. Esos gastos corren por cuenta del municipio y una vez terminada la inversión en las acciones reparatorias de los daños ocasionados, evaluaremos si es necesaria una modificación presupuestaria", explicó la alcaldesa Josefa Errázuriz.